Los tres nuevos quirófanos del Hospital Infanta Elena, así como las nuevas salas de reanimación y preparación de pacientes, inician hoy de forma normalizada su actividad, tras la finalización de la segunda fase de renovación y ampliación de todo el Bloque Quirúrgico del centro. Un proyecto que se viene llevando a cabo por parte del Complejo Hospitalario Universitario de Huelva, con el fin de potenciar y mejorar la capacidad quirúrgica del centro hospitalario, contribuyendo de esta forma a mejorar los tiempos de respuesta de todo el sistema sanitario público de Huelva.
El proyecto total va a requerir de una inversión global de más de 3,5 millones de euros y supondrá el incremento de la capacidad asistencial del centro hospitalario gracias a las nuevas infraestructuras, que permitirán la realización de más intervenciones quirúrgicas y de mayor complejidad, a la vez que se potencia la seguridad del paciente incrementándose las medidas de control y fomento de la bioseguridad de los espacios sanitarios.
La tercera y última fase de las obras, que se encuentran en pleno proceso de adjudicación tras la publicación de la convocatoria en BOJA el pasado mes de diciembre y para la que se ha reservado ya una partida presupuestaria de 1,85 millones de euros, se iniciará en los próximos meses, una vez que concluya el expediente de contratación. Se trata de un proyecto global que incluye diversas actuaciones y que, cuando se encuentre finalizado, supondrá la ampliación de la superficie del bloque quirúrgico en más de 500 metros cuadrados.
Desde la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas de Huelva y la dirección gerencia del Complejo Hospitalario Universitario de Huelva se ha destacado la importancia de estas nuevas instalaciones dentro del proceso de modernización que el Hospital Infanta Elena viene llevando a cabo en los últimos años, y que ha requerido de un gran esfuerzo inversor por parte de la administración sanitaria, traduciéndose de forma fehaciente en la construcción de una nueva área de Urgencias y la ampliación de la Unidad de Cuidados Intensivos que, junto a los nuevos quirófanos, supondrán una renovación total de sus espacios asistenciales más estratégicos.
Esta segunda fase ya concluida supone la puesta en funcionamiento de tres nuevos quirófanos, totalmente renovados y que incorporan nuevas prestaciones, tanto en lo que se refiere a elementos de bioseguridad, con la instalación de nuevos y exigentes dispositivos de climatización y filtrado del aire, así como sistemas de presión positiva, entre otras medidas, además de la modernización y actualización del equipamiento electromédico, que favorezcan la seguridad y calidad de las intervenciones quirúrgicas.
La ejecución de las dos primeras fases, que han requerido de una inversión cercana a los 1,7 millones de euros, ha supuesto también la puesta en funcionamiento de nuevas áreas de apoyo, como la nueva sala de reanimación o despertar, mucho más amplia y eficiente, así como la zona de antequirófano, destinada a la preparación de los pacientes antes de la intervención y en la que, por primera vez, podrán esperar acompañados de algún familiar, con lo que se mejora la comodidad de los pacientes.
Tras la finalización de la primera fase de la obra de quirófano, que supuso la construcción de un área anexa a la fachada del edificio principal y contigua al bloque quirúrgico, se dio inicio a esta segunda fase, la más importante, que ha venido a actuar directamente sobre algunos de los quirófanos incorporando también la superficie de las antiguas dependencias que utilizaba el servicio de Urgencias, así como parte del espacio destinado a Paritorio, que quedó disponible tras el traslado de la Unidad al Área Materno-Infantil del Hospital Juan Ramón Jiménez.
Las obras, que han permitido ampliar significativamente la superficie del Bloque Quirúrgico, que pasará de contar con alrededor de 1.100 metros cuadrados a más de 1.700, ha favorecido el establecimiento de nuevos circuitos que faciliten la trasferencia de pacientes con la mayor seguridad biológica. Además y entre otras medidas, el desarrollo del proyecto fue diseñado para poder ejecutarse en varias fases, de forma que se pudiera ir compatibilizando el desarrollo de las mismas con la actividad quirúrgica que se ha venido llevando a cabo a diario en el hospital, con el fin de minimizar las molestias para profesionales y pacientes mientras se ultimaban las obras.
En la etapa final del proyecto, que se iniciará en los próximos meses, una vez finalicen los trámites del proceso de adjudicación iniciado a finales del mes de diciembre, se podrán habilitar, además de cuatro nuevos quirófanos, un nuevo Hospital de Día Médico que tendrá una superficie cercana a los 350 metros cuadrados y estará destinado a la realización de pruebas diagnósticas o administración de tratamientos médicos de mayor complejidad que requieren de supervisión hospitalaria.
El proyecto de obras contempla también la habilitación de cuatro salas de pruebas funcionales, en las que se llevarán a cabo tanto las endoscopias respiratorias y digestivas, como otros estudios cardíacos, que permitirán aumentar significativamente la actividad sanitaria en el centro. Además, el Infanta Elena contará con nuevas áreas de organización sanitaria, zonas de estar y una sala de informes, así como las áreas de información a familiares, los almacenes de material quirúrgico y los espacios administrativos.