Los cuerpos sin vida de una mujer de 67 años, su hija de 36, y la hija de la segunda, una niña de cuatro años de edad, fueron hallados el pasado domingo en Sorbas (Almería), un crimen que las primeras investigaciones apuntan a se produjo después de que la madre de la pequeña, identificada como M. G. G, matara a su madre y a su hija y después se suicidara.
La mujer de 67 años, que responde a las iniciales S. B, era de nacionalidad belga, al igual que la supuesta asesina, que estaba separada desde hacía unos meses de un vecino de la localidad y había acudido recientemente al padrón de Sorbas para darse de baja. La presunta asesina mató a su madre con un hacha, ahogó a su hija y luego se ahorcó.
La Benemérita encontró los cuerpos sin vida de dos mujeres de 67 y 36 años y una niña de cuatro años en el interior de un cortijo de la pedanía de El Mayordomo, en Sorbas. Los primeros datos de la investigación, que se inició el domingo por la Guardia Civil después del hallazgo de los cadáveres pasadas las 20.30 horas, apuntan a que una de ellas, identificada como M. G. G, causó la muerte de su madre y de su hija y, a continuación, se quitó la vida, aunque será necesario esperar a los resultados de las autopsias para conocer mejor lo ocurrido.
Los agentes se personaron en el cortijo al recibir una llamada ciudadana. Al parecer, el padre de la pequeña, vecino de la localidad, se encontraba a la espera de la niña para que participara en las fiestas de carnaval.
Tras varias llamadas al móvil a su ex pareja decidió ir hasta la vivienda en donde encontró un cartel en el que se avisaba de que un vecino del barrio tenía una llave de repuesto. Junto a él, el hombre se presentó de nuevo en el domicilio y al abrir se encontró con los cuerpos de las tres víctimas.
Por su parte, el alcalde de Sorbas, José Fernández, ha anunciado tres días de luto oficial por la muerte de las tres mujeres. Fernández, que indicó que el Consistorio también ha suspendido los actos de carnaval pendientes en la localidad, señaló que la mujer más joven presuntamente acabó con la vida de su madre con un hacha y, posteriormente, con la de su hija por asfixia.
De esta forma, según la versión municipal, la mujer se quitó la vida posteriormente con una horca, aunque habrá que esperar a los resultados de las autopsias para comprobar los extremos en los que murieron, según informó un portavoz de la Comandancia.
Fernández explicó que la familia era “bastante conocida” en el municipio ya que el abuelo de la pequeña fue funcionario municipal hasta el pasado mes de enero, cuando se jubiló. El regidor apuntó a que la presunta homicida, de procedencia belga, vivía en el municipio desde hace “algunos años” y actualmente se encontraba separada del padre de su hija, un joven natural de Sorbas.
El primer edil destacó que la mujer, de quien en principio no se conoce que estuviera en situación de enfermedad o depresión, acudió el pasado 13 de febrero a las dependencias municipales para darse de baja en el padrón municipal, si bien esta circunstancia “no hizo sospechar” ningún acontecimiento posterior.
El Juzgado de Instrucción número 3 de Almería se ha hecho cargo de las diligencias relacionadas con el crimen, cuyas circunstancias siguen investigando agentes de la Policía Judicial.