Vecinos de la céntrica calle La Palma han reiterado la denuncia por las molestias que ocasiona un bar. El pasado mes de noviembre los vecinos mostraron por escrito en el Ayuntamiento su oposición a la apertura de un bar con música en el número 19 de la calle, donde estaba situada anteriormente la Sala Poniente, alegando que el ruido que puede producir la música en dicho local “podría alterar la convivencia y la calidad de vida de los vecinos, algunos de ellos con edades muy avanzadas o con una invalidez manifiesta, por lo que necesitan un descanso confortable”.
Además, aseguran que obra en su poder un escrito del año 2004 en el cual Enrique Moresco, entonces teniente de alcalde delegado de Cultura, “se comprometía a que dicho local se emplearía exclusivamente para fines culturales, por lo que estos vecinos se sienten engañados por el señor alcalde, al incumplir dicho compromiso”.
Los denunciantes aseguran que el local no cuenta con licencia de apertura y que los niveles de ruido que han soportado en días pasados les hace sospechar que tampoco esté insonorizado como marca la ley, situación que les llevó a llamar a la Policía Local para protestar por el ruido, comprobando cómo los agentes se personaron en el lugar sin que cesara la actividad y por tanto continuaran las molestias producidas por el bar.
Los vecinos aportaron ayer diferente documentación, como informes clínicos en los que se especifica que el afectado vería alterado el necesario descanso por el ruido exterior y las vibraciones, un listado con las firmas de los vecinos de la calle y el documento que el alcalde firmó en 2004, para que el tema sea estudiado en la Comisión de Defensa de la Ciudadanía.