Un sondeo publicado ayer revela que las medidas contra la recesión respaldan el crecimiento del PP
El propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, lo reconocía el pasado miércoles: las medidas anunciadas para reducir el déficit nacional eran “impopulares”, pero debían llevarse a cabo para evitar que la situación económica del país empeorara en un futuro cercano. Desde el día de ayer, el presidente ya es consciente de que no sólo eran impopulares, sino que también pueden tener un alto coste político para el PSOE. Al menos eso es lo que atestigua el sondeo publicado por el diario El País, en el que se refleja que “el duro ajuste anunciado por José Luis Rodríguez Zapatero ha disparado la ventaja electoral del PP. Un sondeo de Metroscopia, realizado al poco de hacerse público el plan anticrisis, muestra que el PP ganaría las elecciones generales con una distancia de 9,1 puntos sobre el PSOE (42,8% frente al 33,7%), el doble que hace tan sólo dos semanas”. El sondeo, por otro lado, certifica a su vez lo que ya adelantaban otras encuestas publicadas un día después del anuncio de las medidas contra el déficit: que no hay tanta solidaridad social para con los funcionarios, pero sí un posicionamiento frontal contra la congelación de las pensiones. El resultado, por otro lado, más allá de los interesantes datos que aporta, precisa de otro tipo de lecturas, en este caso mediáticas, sobre todo por el posicionamiento cada vez más distante que viene manteniendo el grupo Prisa con las políticas del presidente del Gobierno, o viceversa, después de que las inclinaciones del propio Zapatero se estén decantando más por el grupo Mediapro, pese a que ni Público ni La Sexta tengan aún el peso editorial de El País o Cuatro, por citar los emblemas de cada negocio. En este sentido, ayer fue curioso comprobar cómo en el informativo de la cadena Cuatro, cuando se hacían eco de los datos de la encuesta publicada en su rotativo de referencia, ponían en duda las valoraciones que había ofrecido al respecto el ministro José Blanco: “cuando los datos son malos no se pueden tener en cuenta, pero cuando ocurre lo contrario sí”. En cualquier caso, batallas mediáticas al margen, lo que sí parece evidente es que la encuesta ha venido a certificar que el cálculo inicial sobre la animadversión a las medidas del Gobierno era más que previsible, aunque no que se decantaran de tal forma en favor de la oposición.