El Gobierno kosovar ha denunciado este miércoles la detención por parte de Serbia de diez de sus policías y centenares de ciudadanos, un día después de la decisión de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa de recomendar la entrada de Kosovo a esta organización.
"Diez miembros de la Policía de Kovoso (albaneses y serbios) han sido detenidos en cruces fronterizos (...) Cinco de ellos han sido puestos en libertad y otros cinco continúan bajo custodia", reza un comunicado del Ministerio del Interior, que especifica que entre los arrestados se encuentra el subdirector de la Policía de la comunidad serbia, Dejan Jankovic.
Por ello, ha hecho un llamamiento a las autoridades serbias para la "liberación inmediata de todos los ciudadanos y miembros de la Policía de Kosovo detenidos sin justificación alguna y como señal de venganza", mientras que ha pedido a la comunidad internacional "que condene enérgicamente este comportamiento de Serbia" hacia los kosovares.
"Después de la victoria de ayer de Kosovo en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, donde se aprobó por mayoría de votos el informe que recomendaba la adhesión de Kosovo, Serbia ha activado sus métodos de venganza maltratando a nuestros ciudadanos que viajaban por el territorio", reza ha lamentado.
Así, ha señalado que, "desde primera hora de la mañana, los vehículos que transportaban" a kosovares "fueron atacados, deteniéndolos, confiscando sus documentos personales e interrogándolos sin ninguna justificación". "Nuestros ciudadanos han estado encerrados durante horas en las oficinas de las autoridades serbias", ha denunciado.
Con todo, ha subrayado que esta "prohibición" sobre la circulación y "maltrato" constituye "una violación flagrante" sobre la libertad de circulación". Por ello, ha pedido a sus ciudadanos que "eviten viajar a través de Serbia" dada "la situación de seguridad y el lenguaje constantemente amenazador de Serbia".
La presidenta de Kosovo, Vjosa Osmani, ha criticado que "Serbia está tomando represalias contra" sus ciudadanos, un día después de la votación del organismo, y ha señalado que "el hombre responsable de esto" es el presidente serbio, Aleksandar Vucic.
Por su parte, el primer ministro kosovar, Albin Kurti, ha indicado que durante la mañana "más" de 300 de ciudadanos, incluidos niños, "han sido detenidos arbitrariamente en la frontera, privados de alimentos y medicamentos". "¡Una grave violación de los Derechos Humanos!", ha aseverado.