El alcalde japonés añadió que no puede descartar que se produzcan incidentes inesperados por la presencia del representante diplomático durante la ceremonia
La ciudad japonesa de Nagasaki ha tomado la decisión de no invitar este año al embajador israelí en Japón a su ceremonia anual por las víctimas de la bomba atómica ante la ofensiva de su país en Gaza.
Shiro Suzuki, el alcalde de la ciudad del sudoeste japonés, la última en ser objeto de un bombardeo nuclear y la única junto a la también nipona Hiroshima, anunció su "difícil" decisión en una rueda de prensa en la que explicó que el detonante ha sido la situación humanitaria en Gaza y la percepción del conflicto en el mundo.
El alcalde japonés añadió, además, que no puede descartar que se produzcan incidentes inesperados por la presencia del representante diplomático durante la ceremonia del próximo 9 de agosto.
"Lo más importante es ofrecer condolencias a las víctimas de la bomba atómica. Al mismo tiempo, nos gustaría expresar nuestra fuerte determinación de lograr una paz permanente en el mundo", dijo Suzuki en una comparecencia de la que se hizo eco este martes la cadena pública japonesa NHK.
El funcionario dijo que enviará una carta al embajador israelí llamando a un cese inmediato de la violencia en Gaza y que extenderá una invitación al embajador palestino, como viene siendo habitual.
La decisión de Nagasaki se produce después de que las autoridades de Hiroshima decidieran mantener su invitación a Israel.
Además del representante israelí, la ciudad de Nagasaki ha decidido, por su parte, sacar de su lista de invitados a la ceremonia a Rusia y Bielorrusia por la invasión a Ucrania, dejando en 154 el número de países y territorios que serán invitados al acto conmemorativo de este 2024.