Agentes de la Guardia Civil del Puesto de  Montellano y Utrera detuvieron los pasados días a un vecino de El Coronil por atentar contra un agente de la autoridad y por encontrarse en posesión de una cantidad de estupefacientes suficiente para constituir delito contra la salud pública.
Los hechos acontecían  en la carretera que une Utrera con Montellano, cuando personal del Grupo de Investigación de la Guardia Civil de Utrera, dentro del Plan contra la prevención de drogas a pequeña escala, conocida como menudeo, se encontraban de servicio en dicho punto. Los agentes reconocían entonces a una persona que podía estar relacionada con actividad ilícita relacionada con estupefacientes, circulando en un turismo.

En el citado registro los guardias encontraron una bolsa con marihuana en cogollos, debajo del asiento del conductor. Informado de que se iba a proceder a su detención por el echo constatado, el presunto delincuente reaccionó agrediendo con el puño a uno de los guardias civiles; por lo que  fue detenido por doble delito; el primero contra la salud pública y el segundo por atentar contra un agente de la autoridad.
Acto seguido se trasladó al detenido a las dependencias policiales de la Guardia Civil de Utrera, donde fue cacheado para prevenir un ocultamiento a conciencia de objetos y sustancias que pudieran ser lesivas o perjudiciales. Tras dicho registro se le halló al sospechoso, oculto en el interior de sus ropas, un pequeño paquete que contenía una piedra de cocaína. Una vez se pesaron las dos sustancias encontradas, la cocaína arrojaba un peso de 6,6 gramos, siendo el peso de la marihuana de 112 gramos.
Con esta actuación de la Guardia Civil de Utrera y Montellano se ha desmantelado un punto de venta de droga, ubicado en El Coronil pero que abastecía a las poblaciones limítrofes.

Robo

También estos días, agentes del puesto de Villaverde del Río detuvieron a un individuo por robo  con violencia de una escopeta.
Personados con diligencia al lugar donde presumiblemente habían acontecido los hechos, los guardias procedieron a localizar a alguna persona que hubiera visto u oído algo. Tras varias gestiones, conseguían información de testigos.

Gracias a la colaboración ciudadana y tras varias pesquisas de la Guardia Civil, se identificaba a una persona que se encontraba en el lugar en el momento del robo. Los agentes se trasladaban a su domicilio, y al no encontrarse éste allí, comunicaban a su mujer, la importancia de localizar el arma  así como de su declaración a tal efecto. Tras la confesión de ésta, los agentes encontraban el arma  en la parte baja del carrito de su hijo. Posteriormente, detenían por robo a J.T.G., de Villaverde del Río de 21 años, pareja de la mujer que había confesado dónde estaba escondida el arma.