La Virgen del Carmen salió en procesión la noche del sábado por las calles de la barriada de la Pendola de Lepe poniendo el broche final a las fiestas que cada año se realizan en torno a la Patrona de los Marineros. Las fiestas en su honor han contado con diversos eventos que se han desarrollado durante la pasada semana, sobre todo actividades de contenido religioso en torno al templo donde se venera a la imagen.

También hubo en las fiestas actuaciones musicales y baile en la zona de la lonja municipal así como juegos populares y deportivos para los más pequeños. La programación festiva, coordinada por la Hermandad del Carmen, contó además con homenajes a personas destacadas por su trabajo y trayectoria personal en la barriada.

Pero el momento más emotivo se vivió en torno a la talla de la Virgen del Carmen, que salió en procesión por las calles un año más llenando de devoción y fervor mariano la barriada de La Pendola. La Virgen del Carmen hizo su procesión saliendo del templo que lleva su nombre y volviendo al mismo ya de madrugada.

Al final de la procesión se subastó la vara de la Virgen entre los devotos que quisieron participar en la puja.

L VIRGEN DEL CARMEN RECORRIÓ LA ANTILLA

Dos días después, el lunes, los vecinos de la barriada de pescadores de La Antilla cumplieron con la tradición de pasear a la Virgen del Carmen por sus aguas. La Patrona de los marineros salió en procesión durante la mañana de su festividad ante la mirada de los veraneantes y bañistas y la devoción intensa de los hombres y mujeres del mar. De nuevo la Patrona de los marineros fue llevada a través de las aguas del mar, siguiendo una tradición que se remonta a más de tres décadas en La Antilla, por los marineros que pueblan la Barriada de Pescadores de la playa lepera. La Virgen, dentro de una urna, fue embarcada en una barca que habitualmente se dedica a la pesca tradicional para realizar la procesión marítima que le llevó frente a la parroquia para regresar posteriormente a la capilla de su mismo nombre en la popular barriada.