La gestora de la asociación de vecinos de Los Madrileños que preside Manuel Ruiz quiere que el Ayuntamiento dé una solución definitiva para la pista deportiva y el local social, que el pasado lunes fue objeto de un robo y una ocupación por parte de desconocidos que ha creado la alarma entre los residentes de la barriada.
Los autores del robo se llevaron del inmueble varias cajas que contenían equipación deportiva, que en su día era usada por los más jóvenes de la barriada, pero lo peor ha sido el destrozo del mobiliario existente en el local, ya sin uso. Una mesa volcada, el fichero que contenía documentación de los socios desmantelado y esparcidas las fichas por el suelo, cuadros rotos, ventanas sin persianas es el panorama que ahora presenta lo que fue en su día uno de los vestuarios de la pista deportiva. En el otro los ocupantes han instalado un sillón de mimbre, esparcido por el suelo bolsas de comida y roto el sistema de luces.
Ruiz puso los hechos en conocimiento de la Policía Local y el concejal de Participación, Alfonso Candón, ordenó la reposición de las cerraduras, forzadas por los asaltantes. Pero estas medidas no son suficientes para los vecinos, que hace algo más de dos años abandonaron el local social de la calle Tajo con la confianza de que el Ayuntamiento acondicionasen los vestuarios como sede ya que la pista deportiva lleva siete años, aproximadamente, sin uso. Aunque se instó a Firmes y Carreteras a su construcción, lo cierto es que no se ha hecho nada. La ausencia de una asociación de vecinos, ya que la dirige una gestora hasta que se nombren a sus nuevos representantes, añade más abandono a esta barriada. Y ese es el temor que expresan sus residentes y quienes tienen locales comerciales cerca, que quienes ocuparon el lunes el inmueble vuelvan a hacerlo de nuevo con más asiduidad. “Esto lo van a derribar cada dos por tres”, reflexiona en voz alta Ruiz.
En su opinión, la solución pasa por que el Ayuntamiento decida si derriba el local y desmantela la pista -sin mantenimiento alguno- para ofrecer otro equipamiento a la barriada o bien se hace cargo de su conservación. El presidente de la gestora señala que Deportes cedió estas instalaciones a Patrimonio y Candón se comprometió a interesarse por la situación de este equipamiento y tomar una decisión al respecto.
Ruiz no oculta su preocupación por el estado de la pista “el día que un niño se abra la mano o la cabeza va a ser peor”, dice, y recuerda otro compromiso olvidado, la retirada de la pasarela de peatones sobre la antigua N-IV una vez ya habilitado un paso con semáforos.