Decía Ortega y Gasset que "lo que hace un problema de un problema es que contiene una contradicción", no es de extrañar entonces que a José María Gonzalez “Kichi” le crezcan los problemas al mismo ritmo que le afloran las contradicciones. No hace mucho defendía su apoyo a la construcción en Navantia de cinco corbetas encargadas por la dictadura de Arabia Saudí, ahora acaba de votar a favor de conceder la Medalla de Oro de la ciudad de Cádiz a la Virgen del Rosario. Dice Pablo Iglesias que lo ha manejado todo de una manera ”muy laica”, suponemos que de la misma manera que defiendió la venta de armamento militar a un regimen sanguinario de una manera “muy pacifista”.
Hay que reconocer que no les falta imaginación a la hora de construir argumentarios para justificar sus contradicciones, ahora resulta que lo del laicismo en las instituciones del Estado va por zonas, lo que de Despeñaperros para arriba tiene justificación, de Despeñaperros para abajo es de “postcoloniales” y “urbanitas de izquierdas”. En Cádiz las cosas no son como en la capital, aquí las vírgenes son del pueblo, cosas de pescadores; no como en Málaga donde dar medallas a las vírgenes es de fachas y conservadores. Se agradece que venga un señor de Madrid a explicarnos estas cosas, porque si no uno corre el riesgo de desubicarse espacial y temporalmente.
Argumentarios aparte, parece que algunos siguen creyendo que no hemos cambiado mucho desde el 67 cuando se declaró a la misma virgen alcaldesa perpetua de Cádiz, algunas siguen viviendo en el Cádiz del 67, el de los “niños entregando nardos a la virgen” y el de la exaltación de los símbolos religiosos por parte de las instituciones públicas. Deben pensar que la separación de la Iglesia y el Estado es cosa de afrancesados que no saben cómo “siente y respira el pueblo”.
Nuestra identidad ecofeminista nos hace muy difícil entender como el progresismo del S.XXI hace lo mismo que la derecha en muchas cuestiones. Y es que nos parece muy bien que las personas que quieran participar en los actos y en los cultos de la religión que profesen lo hagan, estamos muy a favor del enriquecimiento personal de las personas a través del contacto en espacios públicos siempre que se respeten los derechos humanos.
Respetar las creencias religiosas de la ciudadanía no es poner medallas a una virgen, más cuando se presenta en el congreso una moción para quitar la misa de La 2. En Andalucía estamos cansados de que los políticos, sea del partido que sean, nos tomen como una tierra atrasada con una cultura más arcaica. Pues se equivocan, Andalucía es tierra de grandes personas, de grandes universidades y hospitales. Cada día más denostadas por las condiciones de trabajo debidas a los recortes que sufrimos por culpa de malos gobiernos, por culpa de gobernantes que desde Madrid miran a Andalucía con desprecio o que utilizan Andalucía como trampolín para llegar a Madrid. Andalucía lo tiene todo para no tener complejos. Andalucía es mucho más que Semana Santa y ferias. Pertenecemos a la comunidad con más espacios protegidos de Europa, somos la región con más horas de sol y con viento, ideal para el desarrollo de las renovables. Somos la comunidad con más kilómetros de costa y con personas trabajadoras y jóvenes que están demostrando fuera de nuestras fronteras todo lo que valen por la falta de oportunidades que aquí sufrimos. Y esto se debe a las políticas estatales a las que nos llevan condenando PP y PSOE desde 1982 y la actitud cortijera que tiene el PSOE con Andalucía.
Yo les pregunto a la gente de Podemos, ¿quieren ser nueva política? No actúen como la vieja. Hay muchas personas con la esperanza puesta en sus políticas y en EQUO queremos compartir viaje para transformar la sociedad, no para repetir errores del pasado.
Miguel Ángel Castellano Mejías, coportavoz EQUO Cádiz
Francisco Sánchez Molina, coportavoz EQUO Andalucía