Bélgica mantenía ayer reuniones con España, Hungría y Alemania sobre el futuro de Opel tras el anuncio de venta de General Motors Europa a Magna, informaron fuentes del Ministerio de Exteriores belga.
Bélgica mantenía ayer reuniones con España, Hungría y Alemania sobre el futuro de Opel tras el anuncio de venta de General Motors Europa a Magna, informaron fuentes del Ministerio de Exteriores belga.
El ministro belga de Relaciones Exteriores, Yves Leterme, ha aprovechado un encuentro con la secretaria de Estado española de Comercio, Silvia Iranzo, y el secretario de Estado húngaro de Competitividad, Zoltan Mester, para manifestar su “inquietud” por el posible cierre de la fábrica de Opel en Amberes, según confirmaron a Efe fuentes diplomáticas españolas.
No obstante, la reunión entre España, Bélgica y Hungría –los tres países que ejercerán la presidencia de la Unión Europea una vez concluya el mandato sueco– se celebró a iniciativa española para estudiar el futuro de la política comercial de la UE en los próximos 18 meses, según las mismas fuentes.
Entre las cuestiones que el trío de países analizó en su encuentro, aparte del caso Opel, destacaron la Ronda de liberalización comercial de Doha, el impulso a las negociaciones con Centroamérica y la Comunidad Andina y las relaciones con los socios euromediterráneos.
En paralelo, Bélgica ha convocado una reunión bilateral con el secretario de Estado alemán de Economía, Bernd Pfaffenbach, de la que aún no han trascendido detalles.
Los contactos están teniendo lugar en los márgenes de una cena informal de ministros europeos de Comercio que se celebra esta noche en el castillo de La Hulpe, al sur de Bruselas.
Fuentes del Ministerio de Exteriores belga señalaron que no se esperan nuevas informaciones al respecto de los encuentros bilaterales y se limitaron a indicar que Leterme tiene intención de recalcar ante sus colegas europeos la importancia del “respeto estricto” de las reglas comunitarias sobre ayudas estatales y de lograr un “enfoque europeo común” en el dossier Opel.
General Motors anunció el pasado viernes la venta del 55% de su filial europea al fabricante de recambios Magna, y también que la fábrica de Opel en Amberes sería cerrada progresivamente.
El viceprimer ministro y titular de Finanzas de Bélgica, Didier Reynders, se mostró el mismo viernes a favor de que la CE investigue un posible proteccionismo alemán en la venta de General Motors Europa a Magna.