El número de demandas de disoluciones matrimoniales, que incluye tanto las separaciones como los divorcios, ha descendido en 2020 un 11,5 % respecto al año anterior, lo que mantiene una tendencia a la baja sostenida desde hace seis años pero más acentuada.

Todos los tipos de demanda de disolución matrimonial presentadas en el año 2020 en la Andalucía mostraron importantes reducciones interanuales, con una disminución conjunta del 11,5 % según los datos recogidos por el Servicio de Estadística del Consejo General del Poder Judicial, de los que ha informado este lunes el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.

En concreto, el año pasado se presentaron 9.216 demandas de divorcio consensuado, un 9,4 % menos el año anterior, y 8.417 demandas de divorcio contencioso, un 12,9 % menos que en 2019.

El mismo descenso en disoluciones se han registrado en las 503 de separación consensuada (- 16,7 %) y las 302 de separación contenciosa (-24,7 %), mientras en 2020 se presentaron 18 demandas de nulidad, las mismas que en 2019.

Aunque es el sexto año consecutivo de descenso de las demandas de disolución matrimonial, la disminución en 2020 ha sido mucho más acusada que en ejercicios anteriores ya que la caída en el número de proceso en 2019 fue del 1,5 % en los divorcios consensuados; del 4,9 % en los divorcios contenciosos; del 6,4% en las separaciones consensuadas y del 8,2 % en las contenciosas.

En cuanto a las distintas provincias andaluzas, Sevilla y Málaga son las que mayor número de disoluciones matrimoniales presentaron, con 1.046 y 1.035 respectivamente, seguidas de Cádiz (766) y Granada (541), Córdoba (369) y Almería, con 337.

Las que menos demandas de disoluciones matrimoniales presentaron fueron Jaén (307) y Huelva (239).

Poniendo en relación las demandas de disolución matrimonial del total del año con la población, las comunidades con mayor número de demandas de disolución por cada 10.000 habitantes han sido Canarias (23,6 ), la Comunidad Valenciana, con 23,5 y las Islas Baleares y Murcia, con 22,4.

En esta clasificación por población, Andalucía ocupa una quinta posición con 21,4 por cada 10.000 habitantes seguida de Cataluña, con 20,6; Cantabria, con 20,4, y Asturias, con 20,2, todas por encima de la media nacional de 20 demandas de disolución.

Las comunidades autónomas que se situaron por debajo de esa media fueron Castilla y León, con 16,4; País Vasco, con 16,8; y Aragón, con 16,9.