Ante la situación generada por la crisis del virus COVID-19, Aqualia, compañía gestora de servicios públicos de gestión del agua, ha activado un Plan de Contingencia con el objetivo de limitar y minimizar el impacto generado por la crisis del coronavirus en su actividad, garantizar el mantenimiento de los servicios con los máximos estándares de calidad y proteger a los empleados. Este plan responde a una estrategia dinámica y está sometido a una actualización permanente por parte del comité de seguimiento. Todas las medidas se están tomando de manera coordinada con las administraciones públicas, titulares de los servicios urbanos del agua (ayuntamientos), así como con las autoridades sanitarias.
Se mantiene una total normalidad en lo que respecta a la garantía de calidad del agua del grifo, ya que los tratamientos de desinfección, habituales y normales, que se vienen aplicando en los servicios de nuestro país son totalmente eficaces para la eliminación del virus. Y así lo reconoce el reciente informe técnico de la Organización Mundial de la Salud (OMS) “Gestión de agua, saneamiento, higiene y residuos para COVID-19”, publicado el pasado 3 de marzo. Este documento incluye las principales orientaciones del organismo internacional sobre el agua y el saneamiento respecto de los virus, y también sobre el coronavirus. Tal y como afirma el informe, el agua desinfectada elimina el virus, por lo que los tratamientos de potabilización del agua que a diario se aplican en los servicios de agua urbana en España son eficaces para la eliminación del coronavirus.
El Plan elaborado y puesto en marcha por Aqualia incluye indicaciones respecto de la movilidad. Se han cancelado las actividades formativas presenciales en grupo, así como todas las reuniones de más de cuatro personas. Tampoco se realizarán visitas colectivas a los centros de trabajo por parte de ningún colectivo. Los Viajes por parte de los empleados se han suspendido, salvo aquellos imprescindibles. El Plan incluye la reducción de la presencia de trabajadores en los lugares habituales de trabajo cuando sea posible, la priorización del teletrabajo y la disposición de los medios técnicos necesarios para facilitarlo.
Respecto a las medidas de higiene, se incluyen una batería de iniciativas, entre las que se encuentran el refuerzo de las medidas higiénicas individuales, el envío de información actualizada a los trabajadores, el uso de elementos de protección individual (EPIs), la limpieza frecuente de los vehículos e instalaciones adscritos a los servicios, y medidas extraordinarias para el acceso a las oficinas de atención al público, como la limitación del aforo en las oficinas o el incremento de la separación física entre los puestos de espera y atención. Para todo ello la empresa está facilitando a los empleados geles o soluciones hidro-alcohólicas.
El Plan de Aqualia contempla la coordinación con la Administración local para el cierre de las oficinas de atención al público, priorizando la atención telefónica y promoviendo el uso de otros canales de comunicación como la app “aqualia contact” o la oficina virtual ubicada en la página web de Aqualia (www.aqualia.com). Si existiera alguna urgencia que requiriera la atención presencial los responsables de las oficinas atenderán a los usuarios mediante cita previa.
Respecto a la operativa concreta en las diferentes localidades, también se han dictado medidas ad hoc, como la suspensión de vacaciones y otros permisos no imprescindibles, el establecimiento de retenes para hacer frente posibles servicios mínimos, modificación de turnos, la flexibilidad horaria, o no tomar lecturas interiores, entre otras medidas. Todas estas instrucciones están orientadas a la protección de los trabajadores de la compañía y al mantenimiento de los servicios habituales. Adicionalmente Aqualia está organizando una bolsa de empleo con el objetivo de activarla en caso de que se presenten necesidades urgentes. En aquellas instalaciones consideradas clave, se han definido planes operativos de mantenimiento y un control de los stocks de reactivos y otros elementos importantes. En estas instalaciones se priorizarán las tareas de reparación e incidencias urgentes.
Desde Aqualia y ante la situación extraordinaria que se está viviendo, se hace un llamamiento a la tranquilidad y a la responsabilidad individual de los ciudadanos. El equipo de la compañía sigue desarrollando las funciones y tareas habituales para garantizar la toral normalidad en la prestación de los servicios públicos relacionados con el ciclo integral del agua.