La propuesta de la Liga Norte de cobrar 50 euros por la expedición y renovación de los permisos de residencia en Italia quedó ayer fuera de las enmiendas del Parlamento.
La propuesta de la Liga Norte de cobrar 50 euros por la expedición y renovación de los permisos de residencia en Italia quedó ayer fuera de las enmiendas del Parlamento.
La propuesta, que causó este viernes un gran revuelo en la política italiana por el carácter “discriminatorio” que muchos veían en ella, no ha sido incluida por las comisiones del Parlamento italiano dentro del paquete de enmiendas que deberán ser aprobadas para hacer frente a la crisis.
“A partir del año 2009 podrá ser instituido un impuesto de concesión gubernativa, por un valor de 50 euros, para la emisión de los permisos de residencia a los ciudadanos extranjeros y para la renovación de los mismos”, rezaba la propuesta que la Liga Norte presentó este viernes.
La Liga Norte pretendía así que el dinero que se recaudara por estos permisos de residencia, que no son necesarios para los ciudadanos de la Unión Europea (UE), fuera distribuido a los ayuntamientos en los que residen los inmigrantes.