La federación Arco Iris y Amnistía Internacional vienen realizando desde hace tres años una serie de talleres sobre Derechos Humanos y Homofobia en Institutos andaluces dentro del programa Escuela sin armarios con la idea central de difundir la igualdad así como que los gais,lesbianas, bisexuales o transexuales no sufran insultos, acoso o marginación en los centros escolares.
Ha sido este año el Instituto de Educación Secundaria Caleta el primero de la capital en recibir el taller de manos de la monitora Esperanza Moreno, activista voluntaria de Arco Iris, que a pesar de su formación en Bellas Artes, dio un buen día un giro a su trayectoria y ahora está volcada en la enseñanza de la igualdad y la no discriminación, así como en acabar con todo tipo de violencia contra el colectivo LGTB entre los estudiantes gaditanos de 12 a 17 años.
Moreno, que en el transcurso del presente curso 2014-2015 tiene previsto impartir el taller a unos 3.000 alumnos gaditanos, apoya sus enseñanzas en un informe realizado por la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (Felgtb) para la oficina del Defensor del Pueblo, el cual alerta de que el 60% de los varones homosexuales o bisexuales sufre acoso escolar y que el 43% de éstos se ha planteado el suicidio en alguna ocasión.
La monitora arranca sus talleres con la exhibición del vídeo For The Birds, de Pixar, en el cual unos pájaros animados muestran una serie de valores a extraer partiendo de la discriminación a quien es diferente.
Además, y para sorpresa del alumnado, Esperanza Moreno suele entregar un cuestionario de Heterosexualidad entre los escolares, quienes ante preguntas tales como “¿Cuándo descubriste tu heterosexualidad?”, “¿te costó mucho aceptar tu heterosexualidad?”, “¿Conoces casos similares?” o “¿Piensas contárselo a tus padres?”, caen en la cuenta que son las típicas preguntas que la sociedad plantea a quienes toma por diferentes, es decir, gais, lesbianas, transexuales o bisexuales.
Tras resaltar que exceptuando casos aislados “como el de un chico tan machista que tuve hasta que preguntarle si tenía hermana y si a él le parecería bien que se le practicara una violación correctiva en caso de que fuera lesbiana, como hacen en algunos países, en general responden bien a los talleres, atienden, se interesan e incluso llegan a las conclusiones de las que se trata el asunto”, expone Moreno, la cual añade que “hasta ha habido algún chico que salió del armario en pleno taller y ante sus compañeros o que me llamó por teléfono dándome las gracias por otorgarle el valor de poder hacerlo”.
Ya que desde Arco Iris piensan que se trata de “un problema estructural” que el sistema educativo debe afrontar ya que sólo uno de cada cinco jóvenes acosados recibe ayuda del profesorado, proponen que este tipo de talleres que fomentan el respeto a la diversidad es algo que también deberían recibir profesores, equipos directivos y padres.
El IES Caleta
El IES Caleta, lugar donde tuvo lugar este taller impartido por la activista Esperanza Moreno, ya venía desarrollando desde tiempo atrás un Plan de igualdad entre hombres y mujeres y como explica la docente Noemí Atiénzar, "dentro del Plan intentamos desarrollar un programa, cuyos objetivos se integran todos en dos finalidades fundamentales, que son detectar y hacer visible ante el alumnado las discriminaciones, estereotipos y actitudes sexistas que aún persisten en el ámbito familiar, social, escolar, económico, etc y trabajar para que el alumnado pueda formarse en un ambiente de igualdad y respeto mutuo desterrando las actitudes discriminatorias y estereotipos sexistas, que se trasmiten a través de una cultura tradicionalmente patriarcal, los medios de comunicación (cine, televisión y publicidad) y los roles familiares y sociales".
Señala Atiénzar que mediante actividades como talleres, charlas,exposición en paneles o cartelería, por ejemplo tanto desde el plan de acción tutorial o desde la asignatura optativa Cambios Sociales y Género que es elegida por el alumnado del en Segundo y Tercero de ESO, "nuestro alumnado va avanzando en la sensibilización contra la violencia de género y en el rechazo de actitudes sexistas. Pero es mucho el camino que queda por recorrer y no podemos bajar la guardia. Son tantos los obstáculos a vencer como la publicidad sexista, las series de TV, las redes sociales, etc..., que resulta difícil sustraerse a una realidad de la que los alumnos y alumnas son un fiel reflejo".
Concluye la profesora del IES Caleta que "el 25 de noviembre fue una efeméride clave del Plan de Igualdad donde redoblamos los esfuerzos para visibilizar esta lacra social de la violencia de género y es en los talleres que hemos desarrollado donde vemos aflorar las actitudes machistas, que tanto esfuerzo cuesta desterrar. Seguimos creyendo que podemos ser capaces de desmontar el modelo de cultural patriarcal imperante desde la educación, anteponiendo un modelo igualitario frente al modelo sexista y discriminatorio".