“Queremos romper el aislamiento de los enfermos mentales”, afirmaba el presidente provincial de Familiares, Allegados y personas con Enfermedad Mental (FAEM), Manuel Mariño, con motivo de la celebración del Día Mundial de la Salud Mental. Y su propósito no se queda en simples palabras o manifiestos, ni en actos reivindicativos. Sus palabras son reflejo de horas de trabajo y ganas de que todo el mundo se entere de que ‘Soy como tú aunque aún no lo sepas’.
Por eso, están volcados en una iniciativa para la inserción laboral de personas con enfermedad mental. “Estamos iniciando los trámites para crear un huerto ecológico en Cádiz”. Y para ello ya se han puesto en contacto con el Ayuntamiento de la capital gaditana. La zona por donde podría llevarse a cabo esta iniciativa está en el entorno de la avenida Juan Calos I, y posibilitaría que entre seis y doce enfermos pudieran desempeñar un trabajo cuidando el huerto ecológico.
Para ello, explicó Mariño, “contaremos con un monitor profesional”, así como también pretenden que se integre algún joven con riesgo de exclusión social.
Se trataría de una superficie de unos 600 metros cuadrados, para “cultivar hortalizas como tomates, pimientos, pepinos, y para ello tenemos que contar con agua”. Esta iniciativa existe en otra provincia andaluza, en Huelva, que tiene un huerto denominado ‘Tomates Felices’. De esta manera se le dará su espacio a estas personas con enfermedad mental, se rompería ese “aislamiento” al que están sometidos, ya que se quedan “encerrados en sus propias casas”.
En Cádiz
“Queremos que se les vea como a una persona normal”. Por eso, FAEM atiende a estos enfermos con sus transtornos, que pueden ir desde la esquizofrenia, hasta la bipolaridad, los límites de personalidad o la depresión crónica.
Además de a través de la inserción laboral, la asociación también lucha con terapias y talleres. A nivel andaluz hay alrededor de 160.000 enfermos, de los que cerca de 40.000 se encuentran en la provincia de Cádiz. No obstante, advierten que “cualquier persona desarrolla durante su vida un trastorno mental”, por lo cual nadie puede sentirse “a salvo” de caer en las redes de una de estas enfermedades. Generalmente, este tipo de trastornos se sufre en la adolescencia, entre los 14 y 20 años, y puede ser provocado por crisis de ansiedad grave, provocados por los estudios, las drogas o un simple desengaño amoroso.
Por el momento no hay una casuística real y objetiva respecto a esta enfermedad. Según Mariño, hay “mucha investigación, pero a día de hoy no hay remedios para acabar con ella. Sí se conocen y se tratan los síntomas, de tal forma que con la medicación y el conocimiento se posibilitaque el enfermo se sienta más estabilizado dentro de su entorno”.
FAEM tiene su sede en los bajos de Telegrafía Sin Hilos, en un local cedido hace cuatro años por el Ayuntamiento.
Manifiesto en el Puerta del Mar
Una integrante de la asociación leyó el Manifiesto del Día Mundial de la Salud Mental, donde se aseguraba que “yo no quiero sufrir, necesito tener un trabajo, yo como tú sueño, yo quiero amar y ser amado, muchas veces no entiendo lo que pasa ni por qué pasa, deseo que me escuchen y me comprendan, igual que tú”. Son “pacientes, guerreros, caminantes por lo incierto”