El Ayuntamiento comienza a aplicar este miércoles su ambicioso plan de peatonalización para hacer del centro de la ciudad una zona más comercial, segura y menos contaminante. La calle más importante que se cerrará definitivamente al tráfico rodado en el marco de este plan será la de La Plaza. Así pues, los conductores que procedan de la Alameda del Río tendrán que continuar por Iro y para Concepción, si pretenden, por ejemplo, llegar al aparcamiento subterráneo que se encuentra bajo el Mercado, o proseguir recto si quieren acceder a la avenida Diputación. Para llegar al Centro Médico los usuarios podrán continuar por la calle Arroyuelo, que sólo podrá ser utilizada para este cometido.

Igualmente, pasará desde hoy a ser peatonal un tramo de Nuestra Señora de los Remedios (desde Fraile hasta La Plaza) y otro de Arroyuelo (desde Concepción hasta La Plaza).
No obstante, por estas calles sí podrán circular los propietarios de garajes, mediante una acreditación que se les facilitará desde la Delegación de Tráfico, los vehículos de emergencias, servicio público y los de carga y descarga en horario de 8.00 a 10.00 y de 15.00 a 17.00 horas.

La peatonalización de estas calles traerá consigo varios cambios de sentido, como por ejemplo en el tramo de calle Caraza que va desde el aparcamiento subterráneo del Mercado hasta avenida Diputación, que ahora pasa a tener dirección a la zona de La Longuera.
Por su parte, los autobuses que transitan por la calle La Plaza se reducen en un 50 por ciento y la parada de taxis se traslada a la calle Caraza. En cuanto a las motocicletas, la medida más destacada es que se dedicará la calle Cádiz a su estacionamiento.

En la jornada de ayer se ultimaron todos los detalles desde el punto de vista de la señalización. A partir de hoy habrá una mayor presencia policial en el centro, con el objetivo de proseguir informando a los conductores del nuevo diseño en el tráfico. Durante los primeros días el cometido de los agentes será éste, dejando a un lado la imposición de sanciones.