El alcalde de Chiclana, José María Román, ha anunciado que el Ayuntamiento, a través de Emsisa, vuelve a poner en marcha el programa de rehabilitación de comunidades vecinales por cuarto año consecutivo. Una comparecencia ante los medios de comunicación en la que también han estado presentes el delegado municipal de Vivienda, Joaquín Guerrero, y la gerente de Emsisa, Eva Verdugo. “Se trata de ayudas a viviendas privadas en bloque. En ocasiones, hay vecinos que quieren realizar obras sobre zonas comunes, pero hay otros que no puede porque tienen dificultades económicas. Gracias a este programa, el Ayuntamiento da ayudas a estas familias que no pueden hacer frente al pago”, ha explicado el alcalde.
“Con estas actuaciones se evitan tensiones en los bloques de vecinos y pueden acometerse las obras. Se trata de un programa muy interesante, que ayuda a quien tiene dificultades económicas y que permite que se realicen estas rehabilitaciones”, ha destacado José María Román, que también ha señalado que “tiene elementos limitantes para que se puedan dar este tipo de subvenciones y que tienen que cumplir las personas solicitantes, incluyendo las obras de rehabilitación sobre elementos y espacios comunes, así como aquellas otras obras o trabajos de mantenimiento de las instalaciones fijas y equipamientos propios de la comunidad, cubiertas, fachadas, azoteas o medianeras, obras de accesibilidad que permitan mejorar el acceso desde la vía pública al edificio, así como otros que salven pequeños obstáculos en planta baja. La ayuda máxima por vecino es de 2.000 euros”.
Por su parte, Joaquín Guerrero ha reseñado que “la principal novedad de esta convocatoria con respecto a la anterior es que los edificios que pidan las ayudas deben tener una antigüedad mínima de 20 años, cuando antes era de 25. De esta forma, podemos llegar a más familias. Otra novedad este año es la inclusión de la vivienda pública”.
Los requisitos para que las comunidades de propietarios puedan acogerse a estas ayudas son que los edificios deben estar ubicados en el término municipal de Chiclana, no estar calificados urbanísticamente como fuera de ordenación o en situación de asimilado en régimen de fuera de ordenación, a efectos de la obtención de la licencia municipal de obras, su construcción debe haberse finalizado antes de 2003, contar con la licencia de obras municipal para la intervención y presentar unas condiciones de seguridad estructural y constructiva que garanticen la viabilidad de la intervención. Además, el edificio habrá de contar con un informe técnico sobre su estado y no podrá iniciar las obras con carácter previo a la solicitud de la ayuda.
Todos los vecinos de la comunidad tendrán que cumplir, a su vez, una serie de requisitos, entre ellos, ser mayores de edad, ostentar la propiedad de la vivienda que ocupan, o ser arrendatarios de la misma con contrato de arrendamiento en vigor, estar empadronados en la vivienda que ocupan, no ostentar la propiedad ni derecho real sobre otra vivienda distinta a la que será objeto de rehabilitación y acreditar los ingresos de todos los miembros de la unidad familiar que están empadronados en la vivienda.
Proyectos y programas en materia de vivienda
José María Román ha hecho hincapié en que “el tema de la vivienda es un asunto capital. Por ello, el Ayuntamiento destina este año en su presupuesto más de cinco millones de euros a políticas de vivienda. Así, esperamos adjudicar ya la construcción de 18 viviendas en venta, preadjudicadas ya a los futuros propietarios; la entrega de las 55 viviendas en la calle Delicias; la culminación de un expediente de la construcción de 47 viviendas en esa misma zona, así como el inicio de obras en este 2023 de 27 viviendas para la reposición de la barriada de El Pilar. Esto suponen unas 150 viviendas”.
El alcalde de Chiclana también ha anunciado que “estamos en conversaciones para adquirir solares abandonados en el casco urbano para hacer viviendas en el centro. Intentaremos comprar estos inmuebles, porque es importante poder actuar en esta zona, al igual que es importante recordar que, junto a las ayudas para la rehabilitación de comunidades, contamos con subvenciones para ayudar al pago del alquiler y de la hipoteca, para aquellas personas que tienen dificultades económicas, así como el plan Ciconia también para ayudas al alquiler. Siempre queda mucha tarea por hacer, pero en el presupuesto de 2023 damos un salto importante en la capacidad de destinar dinero público para la construcción. Esto tiene que ver con decisiones políticas que hemos tomado en este Gobierno para que pueda aparecer dinero público para la construcción de vivienda pública y para ayudar a las familias que tienen dificultades para soportar los alquileres y las hipotecas”.