Finalizada la temporada alta de playas en Chiclana, Cruz Roja y el Ayuntamiento de Chiclana hacen balance del número de atenciones realizado por el servicio de socorrismo y vigilancia, que comenzó el pasado mes de febrero y continuará hasta noviembre.
Más de
3.760 atenciones se han realizado desde que comenzó el servicio en las playas de Chiclana, la inmensa mayoría en los meses de temporada alta entre junio y septiembre. La mayoría de estas atenciones son de carácter sanitario (2390), generalmente de carácter leve como la cura de reacciones a picaduras o a diferentes alergias, así como torceduras o luxaciones.
Un total de 1.170 de las atenciones son de tipo social: en esta tipología se incluyen, por ejemplo, el servicio de
pulseras identificativas que se utiliza para localizar a menores extraviados. Este verano, se ha entregado un total de 120 pulseras y se ha ayudado a
localizar a 133 niños y niñas; también se ha prestado ayuda a 21 personas mayores que se habían extraviado o desorientado.
De las 1.170 atenciones sociales totales, más de
895 han estado relacionadas con el servicio de baño adaptado que se presta en dos puntos de las playas: en la Segunda Pista de la Barrosa y en la playa de Sancti Petri, donde las
personas con problemas de movilidad tienen un espacio con fácil acceso, sillas anfibias para el baño, el acompañamiento de socorristas y el préstamo de muletas y otros artículos de apoyo. Este año, el espacio de baño adaptado de la Segunda Pista ha contado con
un servicio pionero en España de fisioterapia y de ocio y tiempo libre, gracias a la colaboración de la Fundación Axa.
En este balance destaca la importancia de las
acciones preventivas que se han realizado durante todo el verano, ya que evitan que se produzcan accidentes, tanto leves como graves.
Desde el comienzo del servicio de playas, se han contabilizado más
de 5.475 acciones de este tipo, en las que los socorristas ponen el acento en la prevención: se incluyen en estas las rondas en las embarcaciones, los avisos a los usuarios que se encuentran en zonas de peligrosas o no permitidas, los avisos a las embarcaciones o quienes practican deportes acuáticos en zonas de baño, la recogida de objetos en el agua o la arena que puedan causar un riesgo, etcétera.
Con este tipo de actividad preventiva se consigue reducir el número de rescates y atenciones sanitarias a los usuarios de las playas.
En este punto, cabe destacar que en todo el año se han realizado 92 rescates del agua de personas, el 50% de ellos con problemas de carácter leve. También se han contabilizado 109 traslados a centros sanitarios, aunque 95 de ellas eran no urgentes o realizadas por sus propios medios.
Drones de última generación es también una de las últimas novedades de esta temporada en las playas de Chiclana: una
innovación en el rescate que proporciona
más seguridad a las personas rescatadas y al propio personal de salvamento. Para localizar objetos flotantes, manchas de contaminación, o posibles personas con necesidad de ayuda en el agua, se ha incorporado un dron que
“nos permite avisar a los bañistas gracias a su altavoz”. De este modo, se les pueden dar indicaciones para su tranquilidad, avisos en zonas de baño prohibido o cualquier otro mensaje de relevancia desde la distancia y con total seguridad.
Cruz Roja despliega sus recursos en un total de
248 playas de la península y las islas, entre ellas, las playas de la Barrosa y de Sancti Petri. “A
unque la parte de rescate parece más importante, la prevención es esencial”, destaca Miguel Ángel Sánchez, responsable de ‘Playas’ de Cruz Roja, “
si no hacemos prevención con las personas en la playa, habría el doble de situaciones de riesgo, y atenderíamos al doble de personas”.
En esta línea recalca que “
no es que recordemos únicamente que usen protección, o que no se bañen sin bandera verde; les indicamos también los motivos por los que está el baño prohibido, porque aunque parezca que el mar esté en calma y no se corre peligro puede ser una zona prohibida, peligrosa o puede estar el agua contaminada”. De esta manera, apostilla, “
estamos más cerca que nunca de las personas, junto a ellas, para ser mejores también a pie de playa”.
El componente medioambiental también forma parte de la intervención de Cruz Roja en las playas españolas. La sensibilización a la población y la movilización de recursos para la recogida de plásticos y limpieza de playas son otras de las acciones destacadas en el dispositivo. De esta manera, Cruz Roja mantiene los sistemas de calidad y de medio ambiente con certificación ISO 9001/14001 para su proyecto de ‘Playas’,
“lo que nos obliga a estar en situación de mejora constante”.
Por su parte, la delegada municipal de Playas del Ayuntamiento de Chiclana, Ana González, resalta “el magnífico trabajo de los profesionales y voluntarios de Cruz Roja que, junto a Policía Local y Protección Civil, ha llevado consigo que chiclaneros y visitantes hayamos podido disfrutar de un gran verano en nuestras playas, con la tranquilidad de contar con un equipo de personas preparadas para la atención a la ciudadanía”. “No obstante, con el objetivo de seguir atendiendo a los usuarios de las playas y que éstas puedan seguir funcionando el mayor tiempo posible, el Ayuntamiento de Chiclana sigue apostando por el mantenimiento de los servicios de salvamento y socorrismo hasta finales de noviembre”, incide.