La selección española estableció su mejor registro de goles en una fase final de un gran torneo al marcar ante Italia su decimotercer tanto
La selección española estableció su mejor registro de goles en una fase final de un gran torneo al marcar ante Italia su decimotercer tanto, en una semifinal en la que Álvaro Morata se convirtió en el jugador español con más goles en las Eurocopas y Jordi Alba igualó los 16 partidos en la competición disputados por Andrés Iniesta y Cesc Fábregas.
En su adiós y con el tanto de Morata, España dejó varios registros nuevos para su historia. Nunca había marcado tantos goles, trece en los seis partidos que disputó en la Eurocopa 2012, y superó los doce conseguidos por la selección de leyenda, cuando fue campeona de la Eurocopa 2008 y 2012.
El gol de Álvaro Morata, con el que se despide como máximo goleador de la selección en la presente Eurocopa con tres dianas, deja su nombre como el techo a alcanzar a las siguientes generaciones, autor de seis goles en la competición europea entre sus ediciones de 2016 y 2020, y supera a Fernando Torres.
Fue el vigésimo segundo tanto del delantero madrileño con el que entró entre los diez máximos goleadores de la historia de la selección. Supera a Julio Salinas, se queda a un tanto de dar caza a Sergio Ramos y Alfredo di Stéfano, pero aún está lejos de los 59 tantos de David Villa.
Jordi Alba igualó los 16 de Iniesta y Cesc y ahora son tres los jugadores españoles con más partidos en las fases finales de Eurocopa.