Mal ha empezado para el equipo de Beardo el Pleno de octubre. Uno de los más conflictivos hasta el momento. Al Gobierno se le acumula la plancha en la recta final del mandato. Y sino que le pregunten a los colectivos que se han plantado esta tarde frente al consistorio, minutos antes de la sesión plenaria. Trabajadores de UPBLA, Puerto Global, ECS, FCC y del sector del taxi han reivindicado sus derechos aprovechando los puntos, relativos, del día.

Un pleno tenso, con más de una equivocación a la hora de votar, lleno de miradas de incredulidad, alguna cabeza cabizbaja e incluso guiños, por parte del alcalde, según comentaba la concejala de Vox Leocadia Benavente durante una de sus intervenciones. Como es ya habitual, tampoco se ha respetado el turno de palabra entre los mandatarios.  Ante la atenta mirada de los trabajadores - a los que no ha parecido convencer las palabras del acalde, Bello o Millán - , la oposición ha llevado al pleno la situación que atraviesa cada uno de los colectivos.

En definitiva, una tarde llena de reivindicaciones y muchos frentes abiertos.

Los impagos de las nóminas de El Puerto Global

El capitán debe de ser el último en dejar el barco. O al menos así debería ser.  Una indicación que parece no tener en cuenta el gerente de la empresa El Puerto Global quien, según cuentan, ha decidido en vez de luchar junto a sus trabajadores, dar por perdida la empresa que "está para cerrar". Algo que no piensan permitir los demás trabajadores:

"Venimos a reivindicar al equipo de Gobierno que ponga solución al problema que ellos mismos causaron hace tres años y medio. Momento en el que decidieron incorporar la plaza de gerente nuevamente,  obligando a que la empresa abonara más de 200.000 euros de los salarios de tramitación - dinero que la empresa no tenía, y que ha hecho que la empresa de tener un saldo positivo haya pasado a tener una deuda tan grande teniendo cada vez más dificultades para  pagar las nóminas-".  Unos impagos que afectan a 42 empleados, "con un salario medio muy decente", explican. "Hemos llegado a estar más de un mes sin cobrar. La gente no tiene facilidades para afrontar el mes sin cobrar su nómina. Una situación que se repite mes a mes. Aunque esta última nomina ha tardado algo menos, tres semanas.  Antes cobrábamos entre el 25 y 30 de cada mes, ahora es imprevisible. Pedimos una solución, que se dejen de rivalidades políticas. No hay derecho. Estamos dando el 100%, mientras el Ayuntamiento tiene una deuda muy fuerte con nuestra empresa. Visto que el gerente ha abandonado toda esperanza, aquí estamos intentando que se solucione" expresaban los trabajadores afectados. 

Hasta julio de 2019, la empresa tenía un saldo medio de 40.000 euros, una vez pagados todos los gastos corrientes, nóminas y proveedores. No tenía ninguna deuda bancaria. Actualmente, El Puerto Global no solo tiene deudas con los proveedores sino dificultades para abonar las nóminas a sus trabajadores. La deuda bancaria es enorme, y se incrementa cada mes, incurriendo en gastos por intereses bancarios cada vez mayores, dejando la situación económica de la empresa en estado crítico. La empresa se hunde y El Ayuntamiento no es capaz de reflotarla.

Desde el Gobierno, Javier Bello, como portavoz y presidente de la empresa en cuestión ha querido hacer hincapié en lo siguiente:  "He pedido a toda corporación que sea capaz de tener altura de miras, y que podamos llegar a un acuerdo para hacer frente a la deuda que el Ayuntamiento mantiene con la empresa y que los trabajadores dejen de estar todos los días 25 en vilo sin saber si van a cobrar o no debido a la incertidumbre que genera el impago por parte del pleno municipal de la deuda obtenida por el Ayuntamiento, que los concejales de la izquierda impiden que se lleve a cabo". 

La partida para los taxistas que ya no incluye los presupuestos 

La partida de 12.000 euros pretendía facilitar a los titulares de licencia de taxi la adaptación de vehículos para personas con movilidad reducida ha sido otra de las reivindicaciones del día.  "La han eliminado del borrador de los presupuestos sin darnos explicacionnes. No es un capricho sino una necesidad. Al ser licencia municipal tenemos derecho, al igual que los autibuses o asociaciones,  a que nos den una subvención para dar un servicio en condiciones a la ciudadanía. Es un alivio para sobrellevar el coste de la adaptación, que cuesta 10.000 euros de los 30.000 euros que vale el coche", lamentaba el vicepresidente de los taxis Francisco Javier González Rodríguez. 

Por su parte el Ayuntamiento, expresa que se ha comprometido con el sector "a que en el momento en el que el Ayuntamiento tenga la capacidad de hacer frente al pago de esta subvención, que se veía arrastrando desde el año 2018. Año en el que el gobierno PSOE añadió una partida presupuestaria para hacer frente a estas necesidades que tienen los taxistas y que, sin embargo fue incapaz de hacer ningún pago que les prometió tanto en el 2018 ni el 2019. Nosotros le hablamos con la mano en el corazón, siendo lo más sinceros posibles, le decimos a los taxistas que el Ayuntamiento no está en las condiciones idóneas para hacer frente a este tipo de subvenciones. Igual que De la Encina no lo consiguió, nosotros no hemos sido tampoco capaces. Pero, estamos trabajando en conseguir para que cuanto antes la subvención llegue al colectivo para prestar el mejor servicio posible a la ciudadanía".

Hola Paseo Fluvial, adiós aparcamientos: la preocupación de los trabajadores de ECS

"El Paseo Fluvial supone el cierre de los aparcamientos Bajamar 1 y Calderón que dejará en la calle a ocho compañeros" comenzaba diciendo el representante sindical de los aparcamientos ECS, José Luis Zampaña Quintero. Un proyecto que, según apunta, nadie les ha comunicado. "En su día, el alcalde nos prometió unas soluciones, que parece que ya no valen, entre las que se encontraba ubicar los aparacamientos en otro emplazamiento. Por ejemplo, la bolsa de aparcamieno que está en el Parque Europa al lado del Hospital Santa María de El Puerto. Ahora parece que no interesa, las elecciones están a la vuelta de la esquina y no es rentable poner un aparcamiento de pago". 

Una situación que el Gobierno afirma estar valorando:  "tendremos en cuenta todos y cada uno de los trabajadores que puedan verse afectados. Estamos buscando alternativas para que estos puestos sigan existiendo y no se vayan al desempleo y además existe un compromiso del gobierno de que no se cerrarán estos aparcamientos hasta que no comiencen las obras en las zonas afectadas".

UPBLA y los policías locales sancionados 

Otro de los colectivos que ha querido sumarse a la cita ha sido el sindicato UPBLA, liderado por su representante Juan José Cobos.  "Hoy venimos para apoyar a estos colectivos  que lo están pasando realmente mal y que dependen del Ayuntamiento. Situaciones igual de gravosas que la de mis compañeros expedientados. Nos unimos en cierta manera al descontento general ante la falta de gestión que tiene el alcalde Germán Beardo en este Ayuntamiento. No gestiona en limpieza, ni en Puerto Global ni en seguridad. Queremos que esta ciudad tenga un político de calidad y un alcalde que gestione y no quiera solucionar las cosas a base de expedientes y redes sociales" añadía Cobos.

"Desde luego, el Ayuntamiento tiene muchos frentes abiertos, promesas que no ha cumplido y mentiras como la de la subida salarial de 3.000 euros que dice que hemos pedido. Cabe decir que durante el fin de semana, El Puerto cuenta solo con cuatro o cinco policías locales para cubrir una ciudad de 90.000 habitantes. El Juzgado le ha dado ya la razón a tres compañeros, mandando un auto al Ayuntamiento para que los reincorpore de manera inmediata. Seguimos creyendo que la justicia nos va a dar la razón y que es una cacicada más de este alcalde que tenemos", sentenciaba.  

Respecto a este tema, el portavoz del Gobierno no ha querido hacer alusión ninguna: "Sobre el comportamiento de UPBLA, no tengo nada que decir. El gobierno ya ha dicho lo que tenía que decir respecto al comportamiento de estos señores a lo largo de estos meses".

Una huelga de basura que amenaza con volver si no se firma el convenio

Este asunto viene de lejos, concretamente de dos años atrás,  tal y como recuerda Manuel García Hidalgo, presidente del comité de FCC:   "La empresa siempre ha argumentado que como no ha pliego no se puede firmar el convenio. En la última reunión, celebrada el día 30 de agosto, llegamos casi a un acercamiento. La empresa tenía un poco de libertad ahí para manejar lo que era el tema económico de la contrata. Pero ayer, la cosa dio un giro. La empresa nos citó y después de un rato dialogando, nos comunicó que no habrá una subida salarial distinta a la que nos ofreció en agosto. Nos ofrecía un 6% en seis años. Algo que hemos rechazado. La empresa ha dado por terminada las negociaciones del convenio colectivo, dice tener las manos atadas por el pliego de condiciones", afirmaba.

"Entendemos que si la empresa no se sienta y da un paso adelante para la firma del convenio colectivo, no tendremos más remedio que volver a las reivindicaciones y terminar en la huelga colectiva, como ocurrió en 2018", anuncia. A partir de hoy, el comité de empresa empezará a hacer distintas movilizaciones y se convocará la huelga en la fecha que la asamblea diga.

El comité entiende que "los políticos son los responsables" puesto que  "tenían que haber sacado el pliego de condiciones después de un año de prórroga y un año en precario".

"Llevamos toda la vida así, esto depende de una subcontrata que depende del Ayuntamiento, y el que tiene que aprobar cualquier documento es el Ayuntamiento. Desde que entró el señor Beardo estamos abandonados, no se ha querido sentar en ningún momento. No nos deja otra alkternativa que hacer las manifestaciones oportunas que crea la plantilla y terminar en la huelga" finalizaba el presidente del comité de FCC, Manuel García Hidalgo, tras reivindicar el convenio que se firmó en 2018. 

Un pliego en el que, desde el gobierno, están trabajando."Tendremos en cuenta todas las reivindicaciones de los trabajadores. Nos sentaremos en los próximos meses para trabajar en el nuevo pliego que lo que queremos es que preste el mejor servicio posible a todos los portuenses. Para que eso sea así, evidentemente, los trabajadores tienen que tener un colectivo adecuado a las necesidades de la ciudad para que ellos puedan trabajar de una manera cómoda y conforme sin ningún tipo de problema", concluye Bello.