El presidente del Gobierno, el socialista Pedro Sánchez, ha afirmado este lunes, al presentar a sus nuevos ministros de Sanidad e Industria, que quedan "nueve meses de legislatura", lo que implicaría celebrar las elecciones generales en diciembre. Para eso sólo caben dos domingos posibles: el 3 de diciembre, lo que implicaría tener que disolver las Cortes en octubre, o bien agotar el mandato de Congreso y Senado y acudir a las urnas el 10 de diciembre.

En su declaración institucional al anunciar la designación de Héctor Gómez y José Manuel Miñones como nuevos ministros de Industria y Sanidad, Sánchez ha afirmado que, "con estos nombramientos, el Gobierno afrontará la recta final de la legislatura" para continuar profundizando en los grandes objetivos de legislatura "en estos próximos nueve meses".

La mención expresa a esos nueve meses lleva el escenario electoral a diciembre y sólo hay dos domingos disponibles, el 3, que supondría acortar la legislatura y disolver las Cortes el 20 de octubre, o bien ya el 10, límite máximo para celebrar elecciones y sin necesidad de disolver las Cámaras antes del 10 de noviembre.

La opción de celebrar elecciones generales el 10 de diciembre sin disolver las Cortes anticipadamente estaba incluida en un informe que hicieron los letrados del Congreso para la Comisión Mixta de la Unión Europea con vistas a la Presidencia española de la UE en el segundo semestre del año.

COMO MUY TARDE, 30 DÍAS DESPUÉS DEL 10N

El documento, firmado por Manuel Delgado-Iribarren, letrado de la Comisión Mixta, sostiene que las elecciones generales tendrían que celebrarse, como muy tarde el 10 de diciembre de 2023, un mes después de las últimas elecciones generales celebradas.

En la mayoría de los precedentes, lo habitual ha sido que el presidente del Gobierno adelante la disolución de las Cortes para celebrar elecciones 54 días después del decreto de convocatoria, y ésa sería la vía si Pedro Sánchez optase por comicios en octubre o noviembre, o incluso antes.

Pero en el documento, recogido por Europa Press, se apunta la opción de dejar agotar el mandato de las Cámaras sin tener que disolverlas en octubre.

Según el artículo 68.4 de la Constitución, el mandato de Congreso y Senado concluye cuatro años después de la elección de las Cámaras o el día de la disolución, es decir, si no hay decreto de disolución, el mandato finalizará el 10 de noviembre de 2023, dado que las última generales fueron el 10 de noviembre de 2019.

Y, de no producirse la disolución anticipada, "el decreto de convocatoria (de las elecciones) deberá firmarse el lunes 16 de octubre de 2023, entrando en vigor tras la publicación en el BOE el día siguiente y las elecciones deben celebrarse el domingo 10 de diciembre".

AGOTAR O NO EL MANDATO DEL CONGRESO

La diferencia es que, con esta fórmula de "convocatoria de elecciones por extinción del mandato de las Cámaras", durante ese tiempo --entre el decreto del 16 de octubre y el fin natural del mandato (10 de noviembre)-- "las Cámaras mantienen todas sus potestades constitucionales". Es decir, en esas semanas las Cortes podrían seguir aprobando leyes y celebrando su actividad ordinaria.

La opción del 10 de diciembre permitiría además, si Moncloa y Zarzuela lo acordasen, que el Congreso pudiese acoger la ceremonia del juramento de acatamiento de la Constitución de la Princesa de Asturias coincidiendo con su decimoctavo cumpleaños, el 31 de octubre. No existe obligación legal de que sea el mismo día de su acceso a la mayoría de edad, pero así lo hizo su padre, el ahora Rey Felipe VI.

Eso sí, tanto el 3 como el 10 de diciembre comparten vecindad con el 'puente de la Constitución', lo que podría influir en la recta final de la campaña y en la participación electoral. Si Sánchez apura hasta el 10 de diciembre, el cierre de campaña tendrá que ser el día festivo (8 de diciembre), en pleno puente.

Y todo ello en unas semanas cargadas de actividad institucional por la recta final de la Presidencia Española de la Unión Europea, que concluirá el 31 de diciembre de 2023. En los dos supuestos, Sánchez acudirá al Consejo final de jefes de Estado y de Gobierno de la UE estando ya en funciones, celebrados ya los comicios.