El diputado general de Guipúzcoa, Martin Garitano, ha aplaudido que la alcaldesa de Mungia haya dado "un paso adelante en la desobediencia civil", si bien ha apostado por "ir de la mano" para que la bandera española "nunca más ondeará en un ayuntamiento o institución regida por abertzales".

   Garitano, que ha presentado en Bilbao una conferencia de la diputada Helena Franco en el Forum Europa-Tribuna Euskadi, se ha pronunciado, de este modo, en relación a la dimisión de la alcaldesa de Mungia, Izaskun Uriagereka, y la concejal de Cultura, Miren Begoña Bilbao, pertenecientes al PNV, para no ejecutar la sentencia del Tribunal Constitucional que ha ratificado que el Ayuntamiento vizcaíno debe colocar la bandera española.

   El diputado general de Guipúzcoa ha expresado su "respeto" por la decisión adoptada por la alcaldesa jeltzale, así como su "aplauso" a que "alguien decida dar un paso adelante en la desobediencia civil y negarse a acatar una imposición".

   No obstante, ha precisado que "la desobediencia civil es un instrumento precioso que tenemos para la emancipación nacional y social que la mayoría" de la sociedad desea y, por ello, ha apostado por utilizarla "con la precisión de un bisturí".

NO PRETENDER QUE "ALGUIEN SE INMOLE"

   En este sentido, ha insistido en la necesidad de "aunar fuerzas y estructurar estrategias de desobediencia" para "ir todos de la mano", en lugar de que "pretender que alguien se inmole políticamente en beneficio de intereses que puedan ser espurios".

   "Vayamos todos de la mano y la bandera española nunca más ondeará en un ayuntamiento o institución regida por abertzales", ha asegurado el diputado general de Guipúzcoa.