La Policía confirmó que tres mujeres murieron y al menos otras diez personas resultaron heridas cuando un hombre irrumpió en un gimnasio en las afueras de Pittsburgh, en Pensilvania, disparó y después se suicidó.

Aunque el martes por la noche, en medio de la confusión, las autoridades indicaron que se habían registrado al menos cinco muertes, incluida la del agresor, ayer redujeron el número a cuatro.

La Policía identificó al autor de los disparos como George Sodini, de 48 años, usuario del gimnasio y que odiaba aparentemente a las mujeres, según medios locales.

El tiroteo ocurrió sobre las 24.00 GMT del martes, cuando Sodini entró al gimnasio y se fue directamente a la sala donde entre 20 y 22 mujeres participaban en una clase de aerobic, apagó las luces y abrió fuego contra las alumnas.

El comisario de la Policía del condado de Allegheny, Charles Moffatt, explicó que el hombre había disparado 50 veces contra las mujeres antes de apuntar el arma contra sí mismo y suicidarse. En el momento del tiroteo había otras 50 personas en el gimnasio.

Según Moffatt, Sodini dejó una nota en su mochila en la que decía que esperaba morir en la matanza. El comisario no dio más detalles del contenido de la nota, pero fuentes de la investigación afirmaron que el hombre había visitado ese día varias veces el gimnasio.