La Unión Estepona Club de Fútbol ha sacado un valioso empate en un difícil campo como es el anexo del Pozuelo con una superficie de muy reducidas dimensiones con césped artificial en mal estado y muy incómodo para la prensa y el espectador.

El partido comenzó con dominio del Estepona en su primera mitad que se aprovechó de la superioridad en el centro del campo con Félix, Urdin y el esteponero Tete que debutaba como titular en el equipo de su pueblo. El Torremolinos salió agazapado en su parcela impidiéndole al Estepona crearle peligro en las inmediaciones de Ávila, las oportunidades más claras fueron a balón parado y sobre todo a tiro de larga distancia de Tete, pero sin demasiado peligro para el meta local tampoco lo tuvo el del Estepona Lolo Soler.


En la segunda parte cambiaron las tornas y era el Torremolinos quien se apoderó de la posesión en la figura de sus medios centros Idriis y Hamet, llegando a crear varias ocasiones de gol en marco defendido por Lolo, el media punta local  Alex Tejada puso a prueba el marco del Estepona desde lejos pero Lolo detuvo bien. En un saque de esquina  botado por el veterano Idriis lo remataba en el punto de penalti muy solo Pinto mandando su dispao alto, a la hora de partido era Hamet que de disparo duro desde la frontal del área lo intentaba teniendo una gran respuesta de Lolo Soler.

La réplica el Estepona llegaba en las botas de Domingo, primero en un lanzamiento de falta desde 35 metro que se marchó rozando la escuadra, seguidamente Samu robó un balon en tres cuartos de campo y abrió para Domingo, quien de fuerte disparo lo estrelló en el palo izquierdo de Ávila en la ocasión más clara para los rojillos, el arreón final lo tuvo el equipo dirigido por Carlos Herrear con una última ocasión para su delantero  Raúl, quien el uno contra uno con Lolo Soler salió victorioso el portero del Estepona.

Con tres minutos de añadido sobre los noventa reglamentarios acabó el partido con el marcador inicial de 0-0. Un punto más para la Unión Estepona C.F. para llegar a los doce y alejarlo un poco más de la zona de peligro y mirar con optimismo los puestos altos de la clasificación.