Las familias de los 21 marineros fallecidos en el naufragio llevan meses insistiendo en la necesidad de bajar
El juez que investiga el naufragio del buque gallego Villa de Pitanxo en Canadá ha pedido un informe pericial para determinar "la utilidad", "necesidad" y "posibilidad" de acceder al pecio y si ello contribuiría a esclarecer las distintas versiones ofrecidas por los supervivientes de la tragedia.
En una providencia, del 8 de septiembre y a la que ha tenido acceso Efe este viernes, el magistrado de la Audiencia Nacional Ismael Moreno encarga un informe a petición de la Fiscalía para "dictaminar", entre otras cuestiones, si "es posible acceder al pecio, y si sería útil para comprobar los extremos referidos en las distintas versiones de los hechos".
Las familias de los 21 marineros fallecidos en el naufragio llevan meses insistiendo en la necesidad de bajar al pecio para obtener detalles que permitan esclarecer lo sucedido, algo que, insisten, es seguro, legal y plausible, además de no excesivamente costoso para las arcas del Estado.
El juez que investiga el caso se ha dirigido a la Comisión Permanente de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos, dependiente del Ministerio de Transportes, para que informe sobre la cualificación de su personal para elaborar la pericial sobre las causas del siniestro y sobre "la posibilidad, utilidad y necesidad de acceder al precio para poder resolver acerca de dicha cuestión".
Tres días antes de dicha providencia, el 5 de septiembre, y al margen del procedimiento judicial, la Comisión emitió una comunicación en la que señalaba que se habían iniciado consultas para determinar los medios técnicos necesarios y el coste económico de bajar al pecio, que -admitía- "podría contribuir" a obtener datos de interés.
Con independencia de esta comunicación, fuentes jurídicas informan a Efe de que el juez todavía no ha obtenido respuesta a la providencia en la que solicitaba el informe, encaminado asimismo a determinar si con los datos de los que se dispone en la causa "se puede descartar o no alguna de las versiones" dadas por el patrón del barco, investigado en la causa; su sobrino o un marinero de origen ghanés, sobre lo que ocurrió en el buque pesquero.
Es decir, sobre la "causa probable del accidente" y sobre "la corrección de las decisiones adoptadas por el capitán".
Hace unas semanas el juez acordó mantener su competencia para investigar el naufragio, en contra del criterio de la Fiscalía, una decisión que recurrieron la representación legal de Pesquerias Nores Marín SA y del patrón del arrastrero gallego, que quieren que rcaiga en un juzgado de Marín o de Cangas de Morrazo (Pontevedra), donde está el domicilio de Juan Padín.
El armador del buque también planteó consultar al Tribunal Supremo para que resuelva el conflicto de competencia.
El Villa de Pitanxo se hundió el 15 de febrero en aguas internacionales cercanas a la isla canadiense de Terranova en la que fue una de las mayores tragedias de la navegación española. De 24 marineros enrolados, solamente tres sobrevivieron, y sólo se encontraron doce cuerpos de los fallecidos.