Por primera vez en el verano los termómetros de la capital sobrepasaron la cifra de 40 grados. Aunque las temperaturas registradas fueron algo menores, al sol se llegó a la temida cifra y a primera hora de la tarde la ciudad ya tenía el aspecto fantasmagórico de todos los meses de julio y agosto en sus calles. Lejos de las primeras previsiones, que anunciaban que la ola duraría unos cuatro o cinco días, finalmente la Agencia Estatal de Meteorología advirtió ayer que aunque no se esperan valores extraordinariamente altos en las temperaturas, la acusada persistencia, alrededor de 10 días en amplias zonas, de valores superiores a lo normal para esta época del año, justifica esta situación meteorológica especial, dice la agencia.


Por otro lado, advierte del peligo y pide que se extremen las precauciones y las exposiciones al sol, sobre todo en las horas centrales de día. En cuanto a las temperaturas nocturnas, Jaén ya ha comenzado a registran las más altas de país, como cada año durante el verano.