Agentes de la Policía Nacional han detenido en Jaén a un joven acusado de robar 37.000 euros pertenecientes a unos tíos suyos que guardaban dicha cantidad en su domicilio; en concreto, en una caja fuerte en la que había otros 3.000 euros más que no fueron sustraídos. Según explicó la Policía en un comunicado los agentes que se han encargado de la investigación del caso, pertenecientes al Grupo de Delincuencia Especializada y Violenta de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Jaén, descartaron que la sustracción pudiera haber sido llevada a cabo por delincuentes profesionales, y se centraron en el "entorno más cercano de las víctimas", dado que "no se habían llevado todo el dinero y no había signo de violencia".


Los investigadores llegaron también a la conclusión de que el autor o autores de la sustracción debían de tener una "especial relación" con el entorno familiar, ya que quien hubiera cometido el robo había dejado una cantidad de dinero, 3.000 euros, lo cual "demostraba que no deseaba causar excesivo daño a las víctimas", y, por otra parte, "nada había sido violentado, ni puertas, ni cerraduras, ni ventanas, y la caja fuerte no presentaba signos de forzamiento".


Así las cosas, finalmente los agentes del Cuerpo Nacional de Policía han identificado a un sobrino de las víctimas como el supuesto autor del robo, que ha sido detenido tras ser sometido a una "estrecha y discreta vigilancia" y cuando se encontraba repostando su vehículo en una estación de servicio junto a su compañera sentimental, que relató a los agentes que su novio "la tenía amenazada y atemorizada".


Se da la circunstancia de que el detenido supuestamente presenta "un gran vínculo de dependencia económica" con sus tíos, a quienes debe "39.000 euros por diferentes préstamos que les había pedido con diferentes excusas", según informaron ayer desde la Comisaría central de la capital jienense.