La
Policía Nacional busca a un joven de 20 años, J.D.G. acusado de dar una
brutal paliza a su pareja,
una menor de 17 años de Jerez y que lleva desaparecido desde que ocurrieron los hechos, el pasado sábado 26 de marzo, según confirman a este medio fuentes de la investigación. Ha sido la madre de la víctima la que ha denunciado este violento episodio, aportando fotografías de las lesiones que presenta su hija, después de que
tras más de una semana el acusado siga en paradero desconocido. Según manifestó en El programa de Ana Rosa, la paliza se prolongó durante más de dos horas, y llegó a recibir cincuenta mordiscos durante la salvaje agresión. Como consecuencia, la menor presenta heridas en el rostro, brazos y piernas.
“
Tiene cincuenta mordiscos, la
mandíbula destrozada y
músculos de la mano partidos. Le dio tirones de pelo, con un cable le azotaba”. Los hechos se produjeron en la mañana del 26 de marzo
en la vivienda del presunto agresor, a la que la menor solía irse a pasar el fin de semana.
Llevaban saliendo año y medio pero
“nunca le había pegado antes”, narra su madre. Todo se torció a raíz de la llamada que recibió su novio. “No hubo motivo alguno. Le dijo al amigo que se viniera para casa y mi hija le dijo que no lo veía bien, porque tenía la casa sin recoger y se encontraba mal, estaba dolorida por una fístula. No le dio tiempo a más cuando empezó la brutal paliza de este energúmeno.
Esto que ha hecho no lo hacen ni los caníbales”. “Mi hija le dijo por favor no me pegues me vas a matar, y él le dijo para cómo estás, mejor matarte”, prosigue. Logró zafarse de él suplicándole y prometiéndole que no le iba a denunciar.
“Ella quiso tirarse por la ventana, se le arrodilló porque no paraba de pegarle, no había forma de que saliera de allí. Me llegó a decir: mamá, yo veía la muerte. Le tuvo que engañar para salir de allí”, relata su progenitora, que reconoce que empezó a sospechar que algo no iba bien cuando llamó a su hija esa mañana y tras varios intentos le dijo muy escuetamente que “estaba bien” y que la llamaba después”. “Me sonó extraño y llamé a su pareja. Me dijo que mi hija estaba mal enla cama y no quería coger el teléfono y me colgó”.
En ese intervalo, los hermanos de la menor llegaron a casa y su madre les trasladó que “pasaba algo”. Cuando acudieron al domicilio del novio de su hermana, ella estaba fuera. “La había sacado de casa y la había puesto junto a unos bombos de basura y cuando vio a los hermanos llegar salió corriendo. La joven
está “en shock” y “vive con terror, con miedo y con pánico; se desvela todas las noches, tiene un miedo terrorífico a salir a la calle. Sabiendo que no lo han cogido mi hija no va a poder retomar lo que es una vida medio normal. Es terrorífico tener a una hija con 17 años que no puede ir al colegio porque tiene miedo”.
Tras la denuncia, la Policía Nacional mantiene una investigación abierta para
“esclarecer los hechos” y ha dictado una orden de busca y captura para dar con el paradero del presunto agresor y ponerlo a disposición de la justicia. Su madre cree que ha huido a la sierra gaditana.
Familiares y amigos de la menor han difundido la imagen del presunto agresor en redes sociales para pedir colaboración ciudadana para encontrarlo.