Las modificaciones presupuestarias aprobadas en el Pleno de este miércoles para garantizar el pago de las nóminas de la plantilla municipal en lo que resta de año mantiene abierto un agrio enfrentamiento entre el Gobierno local y el PSOE que unos y otros siguen de algún modo alimentando.

El portavoz del grupo municipal socialista, José Antonio Díaz, ha comparecido ante los medios para insistir en los argumentos ya defendidos en el transcurso de la sesión plenaria. Así, Díaz considera “un hecho objetivo” que el Gobierno local “ha puesto en peligro el pago de las nóminas de los trabajadores municipales” al verse obligado a plantear modificaciones presupuestarias por un importe total de 4,7 millones de euros.

Además, el portavoz socialista sostiene que la alcaldesa, “en medio de risas, chascarrillos, oscurantismo y prepotencia”, reconoció en el Pleno que “hay problemas para pagar la nómina ahora y también los habrá el año que viene”.

Díaz recuerda que el PSOE ya había advertido de los efectos que tendrían “el despilfarro, el derroche, el gasto sin control y la falta de gestión” del Gobierno local, asegurando a este respecto que cada vez que el PP está al frente del Ayuntamiento hay “problemas de pagos de las nóminas” y avanzando que “las siguientes” en sufrir esos efectos “serán las empresas”.

Por otra parte, al portavoz socialista le “preocupa” que García-Pelayo advirtiera de la posibilidad de que el Estado retenga la PIE al Ayuntamiento si no cumple con el pago de más de nueve millones de euros pendiente con Hacienda y sobre todo que reconociera que “tomaría decisiones discutibles” precisamente para hacer ese abono. “¿Cuáles son esas decisiones discutibles? ¿Subir los impuestos? ¿Recortar los servicios? ¿Recortar la plantilla?”, se preguntó José Antonio Díaz.

El PSOE tiene además “serias dudas” sobre la legalidad de “pagar gratificaciones y productividades” acudiendo al fondo de contingencia, porque cree que en este caso “se dan los supuestos de previsibilidad y discrecionalidad”, tanto que el propio informe del interventor no es concluyente en este sentido y considera “discutible” el uso de esta herramienta en determinados supuestos.

El Gobierno local ha reaccionado a estas manifestaciones recordando que el Gobierno que presidió Mamen Sánchez abonó 56,2 millones de euros en concepto de productividades, gratificaciones y pluses entre 2015 y 2023.

No en vano, entre los meses de enero y junio de este mismo año se pagaron 5,2 millones de euros por estos conceptos, “más de la mitad de lo previsto abonar en el total del año”.

Según el Ejecutivo popular, este dato “obliga” al PSOE a “ser cuanto menos más prudente en sus críticas y alarmas”, unas alarmas por cierto “que nadie se cree en la plantilla municipal” porque los trabajadores “saben que las nóminas no corren peligro, ni este mes, ni el próximo ni en adelante”. De hecho, el Gobierno asegura que “ya está preparado el pago de la próxima nómina, que se abonará a final de la próxima semana”.

El Ejecutivo municipal subraya además el aumento “hasta los 8,1 millones de euros en productividades y gratificaciones a la plantilla en 2022, una cantidad que inicialmente estaba previsto que se incrementara hasta los 10,4 millones en este 2023 y que finalmente bajará hasta los 10,1 millones”.

“Estos datos, aportados por el área de Recursos Humanos del Ayuntamiento de Jerez, demuestran que, lejos de un aumento, el Gobierno actual ha contenido la cantidad abonada a la plantilla municipal por un concepto que, lejos de ser discutido, corresponde a lo legalmente establecido en el Estatuto de los Trabajadores y el convenio colectivo por trabajo realizado”, concluye el Ejecutivo municipal.