Trillo dice que aún se limpia y que los daños se evaluarán cuando concluya
Agaden asegura haber detectado 3,8 kilómetros más de litoral del Parque Natural del Estrecho afectado por el último vertido procedente del incendio de los tanques en Gibraltar, con lo que se suma ya "un total de ocho kilómetros afectados de litoral rocoso".
Según ha explicado el grupo ecologista en un comunicado, los técnicos de Agaden siguen realizando recorridos de vigilancia ambiental por el Parque Natural del Estrecho a fin de valorar la "afección real" del vertido.
En esta ocasión, afirma haber detectado varias zonas de litoral rocoso, acantilados y playas rocosas "contaminadas fuertemente de hidrocarburos" en la zona comprendida entre el Faro de Punta Carnero y Cala Arena en el término municipal de Algeciras.
Señala que las principales zonas contaminadas son conocidas como cala del Peral, cala Secreta y cala Arena, todas ellas de un "alto valor paisajístico y ecológico, y parte calificadas como espacios marinos de extraordinario interés y de máxima protección".
Alertan de que estos vertidos "han dañado gravemente el equilibrio del sistema marino, de la zona intermareal, acantilados rocosos y las plataformas de abrasión de este Parque Natural y Reserva de la Biosfera; esterilizando y dejando sin vida a las poblaciones de fauna que alberga estos ecosistemas".
Critican que estas situaciones son "síntoma claro" de que en la Bahía de Algeciras hay un "descontrol absoluto de un sinfín de actividades peligrosas" que mantienen la comarca campogibraltareña en "un estado de tensión y degradación medioambiental y de seguridad ciudadana".
Sostienen que la Bahía algecireña está "saturada" y sufre una "sobrecarga de actividades contaminantes y peligrosas" que están llevando al Campo de Gibraltar a una situación "insostenible" que, si no se toman medidas, desembocará en una "tragedia irreparable".
Por todo ello, va a trasladar los datos recabados al nuevo alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce (PP), para que el Ayuntamiento amplíe la cuantía económica reclamada a la empresa gibraltareña causante del "desastre ecológico". También harán llegar los datos a la Delegación Provincial de Medio Ambiente para que se constaten y proceda a realizar un plan de actuación "urgente" para la retirada de la contaminación del Parque del Estrecho.
Díaz Trillo responde
Por otra parte, el consejero de Medio Ambiente, José Juan Díaz Trillo, advirtió ayer que aún se está limpiando el litoral afectado por el vertido por lo que será más adelante cuando se pueda proceder a evaluar, tanto en extensión como en intensidad, los daños producidos.
En declaraciones a los medios de comunicación en Madrid, el responsable de Medio Ambiente ha hecho alusión así a los nuevos datos de la organización ecologista Agaden, que ha asegurado haber detectado 3,8 kilómetros más de litoral del Parque Natural del Estrecho afectado por el vertido.
Díaz Trillo ha indicado que se han puesto en marcha todos los sistemas de control, seguimiento y evaluación tras el vertido y que, como es habitual, en este caso, en Andalucía se ha actuado "antes, durante y después del incidente". "Ahora estamos en ese después, donde hay que terminar de limpiar para evaluar. En esa evaluación sabremos definitivamente la extensión completa así como, lo que más nos importa, cómo restauramos el espacio degradado, si es que lo ha habido".
Como ya anunció, la Junta prevé pedir "indemnizaciones" a la empresa responsable del vertido si "ha lugar a ello". Como indicó en su comparecencia parlamentaria, hasta el 7 de junio, algo más de 85 toneladas de residuos mezclados con arena habían sido retiradas de la zona.
Por otra parte, sobre el buque escorado este sábado en el Puerto de Algeciras y que será reflotado después de que se descarguen las 144 toneladas de combustible que contiene, el consejero ha dicho que hay un "estricto control y una vigilancia permanente" por si hubiera algún tipo de vertido o fuga.
En cualquier caso, ha recordado que "todos los sistemas de alerta estaban activados", que se han instalado barreras para evitar posibles episodios de contaminación y que los tanques de la embarcación están sellados, aunque --ha añadido--"nunca" se puede descartar algún tipo de fuga del combustible.