La Zona Sur controla desde Torresoto a La Constitución, pasando por el Agrimensor, Federico Mayo, Hijuela de las Coles, Santo Tomás, La Liberación, Cerrofruto, Estancia Barrera, San Telmo, San Telmo Nuevo, Vallesequillo II, Cartuja y La Constitución. Una zona histórica para Jerez, cuyo primer barrio, Federico Mayo, data de inicios de los años 50 del siglo pasado, cuando Federico Mayo Gayarre, director del Instituto Nacional de la Vivienda, realizaba su modelo de ordenación urbana en Jerez. Una zona azotada por el desempleo y la marginación. Una zona complicada, donde se concentra buena parte de las políticas sociales de las instituciones y en la que el día a día muchas veces se complica. Esa monotonía, tan complicada y cargada de vicisitudes, no entiende de razas o religiones, afecta a todos por igual en una de las zonas más afectadas por la crisis y el desempleo.
“Los chinos no pagan impuestos”, “a los moros les dan todas las ayudas”, o “los inmigrantes abusan de los servicios sociales” son ideas preconcebidas que se escuchan en la calle y que evidencian los prejuicios existentes. El objetivo no es atacar al que lo piensa, sino evitar que lo piensen. Un paso adelante lo dio el Centro de Acogida de Inmigrantes de Jerez (Ceain) con la inclusión del programa Stop Rumores, una iniciativa que lucha contra los rumores sobre personas inmigrantes y en la que ha formado parte más de 2.500 personas en toda Andalucía y Melilla, 350 en Jerez. Con un total de 84 entidades colaboradoras en toda la región, el proyecto llama la atención por poner en liza a los ciudadanos los materiales para combatir contra el rechazo al inmigrante, en la mayoría de ocasiones, preconcebido y prejuiciado.
El proyecto Stop Rumores está desarrollado por la Federación Andalucía Acoge, financiado por la Dirección General de Migraciones del Ministerio de Empleo y Seguridad Social y cofinanciado por el Fondo Europeo para la Integración.
Ante los rumores, este programa trabaja para ‘educar’ al ciudadano ante el extranjero, pero en Jerez se ha adaptado para evitar prejuicios contra los residentes de la Zona Sur de la ciudad, en general, nacidos en Jerez, o no. Llama la atención que en pleno siglo XXI haya todavía que luchar ante los prejuicios ante el que es diferente, sin entrar en si es una cuestión racial o social. Teresa Fuentes es la coordinadora local de ‘Stop Rumores’ y explica que el objetivo pasa por “trabajar con el proyecto Stop Rumores en general, pero orientado a los habitantes de la Zona Sur, que suele ser una población bastante estigmatizada y esos estereotipos que corren por la Zona Sur también perjudican mucho la convivencia en esa zona”.
“El proyecto está dirigido a inmigrantes”, asegura Fuentes, quien matiza que “cualquier rumor o cualquier estereotipo de alguna manera infecta la convivencia. Lo mismo que sobre los inmigrantes estos rumores perjudican la convivencia en general, si en un barrio hay un mal ambiente porque se habla mal de un colectivo determinado, pues hemos ido para intentar reflexionar sobre ello y aplicar la misma metodología sobre lo que se dice en el barrio”.
Y es que, según la responsable local del programa, no existen diferencias a la hora de llevar a cabo la iniciativa de cara a inmigrantes o no inmigrantes: “En el fondo creo que todo es social. Si los inmigrantes que tenemos fueran ricos, la gente no estaría en contra de ellos, como un futbolista o un jeque árabe. Sobre ellos nadie se pone en contra, se ponen en contra del magrebí o el africano en general que en teoría, según piensan, vienen a quitarnos los derechos sociales, educativos, etc, etc… Al fin y al cabo, sí que es cultural, pero sobre todo es social”.
En estos seis meses de trabajo, desde la organización estiman que es “complicado” obtener resultados, ya que “nuestro trabajo es educativo y de sensibilización, y como tal, es un trabajo a medio o largo plazo”.
Como asegura Teresa Fuentes, “hasta que no se arraigue en la población, es complicado”, aunque añade que “las cifras son optimistas porque se ha realizado un trabajo que ha llegado a mucha gente en Jerez, con una parte informativa, de cara a colectivos y entidades, y otra formativa, que es la que afecta a lo que llamamos agente antirumores”.

El agente anti-rumor
Desde Ceain, gracias a ‘Stop Rumores’, se trabaja mano a mano con la ciudadanía con diferentes materiales y objetos. El principal, el agente antirumor o antibulos. De las 350 personas que están participando en el programa en Jerez, 60 han tomado ese rol gracias al trabajo de Ceain.
Pero, ¿en qué consiste ser un agente antirumor? “Un agente antirumor puede ser cualquiera”, explica la coordinadora local del programa, quien apunta que “lo que queremos es que ese agente pueda realizar un trabajo que multiplique lo que ofrecemos, de datos y reflexión, pero es difícil saber hasta qué punto esas personas que han participado en los talleres van a llevar a cabo en su vida cotidiana lo que han aprendido”.
Un trabajo prácticamente diario en el que poco a poco han ido integrándose más ciudadanos. Y es que esa es la finalidad de este programa innovador que se ha ido desarrollando por diferentes municipios de toda España; que la comunidad sea el principal agente antirumor, poner las bases para cambiar las mentes del mañana y que la sociedad, en este caso la jerezana, vea con otros ojos al inmigrante.
Los métodos son variopintos. En Tenerife, por ejemplo, la organización sacó a las plazas una ruleta de la fortuna con frases que en realidad eran estereotipos muy arraigados entra la población. O en Fuenlabrada, que quisieron acabar con esos rumores a través de una jornada monográfica durante un partido del Club Baloncesto Fuenlabrada, donde explicaron a la afición el origen de algunas de sus estrellas, llegadas de Nigeria o Senegal.
“Eso es algo más espectacular, más publicitario”, aclara Teresa Fuentes, que recuerda algunas de las acciones realizadas en Jerez, como la llevada a cabo en el Día del Inmigrante, que reunió a 200 niños en la plaza del Arenal portando paraguas que sirvieran para evitar que “calaran los rumores”. “Eso no es lo fundamental”, señala Fuentes, quien informa que el trabajo diario de Stop Rumores “ha sido más sistemático, de ir a centros, colectivos, entidades, etc, etc… A esas personas se les hace un taller, con diversas dinámicas de grupo, para enseñar cómo actuar ante un determinado rumor”.

Desmontando rumores
Enseñamos a través de ejemplos, como con un ‘rol play’, a responder ante un rumor o estereotipo y que sirva para algo, que no sea todo pelearse o discutir”. En definitiva, un día a día más bien monótono, pero necesario. Un trabajo “de mucha documentación, sistemática y que sirviera para que el equipo de agentes pueda tener una base de datos lo más objetiva posible para poder actuar ante los rumores”. En sus inicios, el programa se encontró con varios rumores ya desmontados. Ha sido en estos seis últimos meses en los que el equipo ha realizado un enorme trabajo de documentación “para seguir documentando e identificando rumores”, tanto de cara al inmigrante, como al residente de la Zona Sur, llegando ya a desmontar hasta una decena de rumores o estereotipos.
La campaña antirumores nació en Barcelona hace ya un lustro con el objetivo de luchar  contra la xenofobia de baja intensidad y ya ha calado en muchas ciudades de España y de Europa, donde ha crecido una postura racista debido al aumento de la crisis. El inicio es una encuesta que llamó la atención en la Ciudad Condal, en la que se llegó a la conclusión de que la principal barrera contra la convivencia entre nativos y extranjeros se basaba en "factores subjetivos, prejuicios y estereotipos". Los posteriores estudios en otras localidades sustentaron que la repetición de prejuicios se da por igual en ciudades con un 1% de población extranjera que cuando esta llega al 30%. Por ello, este programa se ha globalizado, llegando a formar a más de un millar de agentes que luchan contra los bulos que atentan a la población extranjera.
A lo largo de este 2015, el equipo de Stop Rumores de Andalucía ha trabajado las estrategias para desmontar los rumores en diferentes contextos de Andalucía y Melilla. Por un lado, los talleres formativos para los agentes antirumor: 431 personas que han adquirido y entrenado los conocimientos y herramientas necesarias para luchar contra las mentiras y bulos que circulan sobre la población inmigrante. En este tiempo, el equipo de Stop Rumores ha desmontado diez rumores relacionados con la convivencia, los espacios públicos, la educación, el mercado laboral, la sanidad y los servicios sociales o el comercio.
Cada rumor ha sido acompañado de una serie de recursos para hacerle frente: infografías con datos objetivos, vídeos con personas expertas y una recopilación de informes y estudios para ampliar información.
Además, la estrategia Stop Rumores ha realizado materiales como un Manual Antirumor o pósters con las infografías, entre otros, para poder hacer llegar a más gente la información que permite desmontar los rumores. A todo ello se puede tener acceso y descargar de forma gratuita desde la página web stoprumores.com.

Radiografía del extranjero en Jerez

Dos de cada diez residentes de la Zona Sur son inmigrantes En Jerez conviven 7.295 extranjeros (3.852 mujeres y 3.513 hombres) procedentes de más de un centenar de países, según los últimos datos del Estudio de Población Extranjera publicado por el Ayuntamiento de Jerez.
De los 207.702 de ciudadanos empadronados, la comunidad extranjera supone sólo el 3,5 por ciento de toda la ciudadanía. Entre las nacionalidades más representadas en la ciudad, encabeza la lista Bolivia (850), seguido de Marruecos (801), Rumanía (472), Reino Unido (412) y China (350). Por continentes, 2.866 personas proceden de América, (2.193 de América del Sur), siendo la zona mundial más confluyente en Jerez, seguida de Europa (2.387 personas) y África (1.518 personas).
En la Zona Sur, la situación cambia. De los casi 27.000 ciudadanos empadronados (26.998 en concreto), 752 son extranjeros, siendo la tercera zona de Jerez donde más residen, tras la zona centro y la zona La Granja-Delicias.
En cuanto a inmigrantes, es decir, población extranjera no residente en la Unión Europea o procedente de países en desarrollo, residen en Jerez hasta 4.954 personas (2.325 hombres y 2.629 mujeres), procedentes de hasta 74 países. De esos casi 5.000 inmigrantes, 596 lo hacen en la Zona Sur, más del 10 por ciento; 2 de cada diez residentes de la Zona Sur son extranjeros procedentes de países en vías de desarrollo o pertenecientes al Tercer Mundo. La principal comunidad residente en esta zona de la ciudad es la marroquí, con 195 ciudadanos, seguida de la argelina (73) y la boliviana (40). Esto supone, según el estudio presentado en su día por el Ayuntamiento, que en Jerez, si la comparamos con otros municipios de similares características poblaciones, el asentamiento de población extranjera e inmigrante ha sido menor, desde el 2008 hasta la actualidad la población extranjera ha representado en torno a un 3 % sobre la población total empadronada.