Los dos primeros meses del presente ejercicio han dejado tras de sí la pérdida de 5.020 contratos de trabajo en comparación con el mismo periodo del año anterior, lo que supone un descenso del 26,67 por ciento.

En concreto, entre enero y febrero se tramitaron 13.802 contratos de trabajo frente a los 18.822 del ejercicio pasado.

Se da la circunstancia de que aquellos fueron además los dos últimos meses de la serie histórica que no se vieron afectados por el impacto de la crisis sanitaria y las restricciones aplicadas a la actividad económica.

Las altas han experimentado sensibles descensos en todos los sectores, siendo más acusado en los servicios, donde se aprecia un desplome superior al 33 por ciento.

Así, mientras en enero y febrero del año pasado se registraron 13.541 contrataciones vinculadas a este segmento de la actividad económica, en este caso la cifra total no ha pasado de 9.067.

En la agricultura se ha perdido el 13,31 por ciento de las contrataciones; siendo las caídas observadas en la construcción y la industria del 7,60 y del 7,48 por ciento, respectivamente.

El sector servicios sigue siendo en cualquier caso el que aporta un mayor número de contrataciones, absorbiendo el 65,69 por ciento de la actividad.

Detrás se encuentra la agricultura (16,04), que precede a la construcción (10,91) y a la industria (7,34).

Conviene recordar a este respecto que en el mismo periodo de 2020 los servicios representaban el 71,94 por ciento de la contratación, de modo que ha perdido más de seis puntos como consecuencia del efecto de la pandemia.

Aumenta la brecha

El colectivo femenino está sufriendo en mayor medida las consecuencias de esta crisis, como demuestra el hecho de que en los dos primeros meses del año la pérdida de contrataciones fuera del 28,26 por ciento, mientras que entre los varones el descenso fue algo menor, del 25,40.

Los hombres protagonizaron además el 56,71 por ciento de las altas, un punto por encima de lo que alcanzaron en el mismo periodo del año anterior. Eso significa que la brecha entre ambos sexos sigue incrementándose. El 95,16 por ciento de la contratación registrada en enero y febrero es temporal.

Ello ha provocado que la contratación indefinida caiga por debajo del 5 por ciento, una barrera que había logrado rebasar en 2020 antes del inicio de la pandemia.