Con la votación de la primera vuelta electoral este domingo, se cierra una etapa de una campaña electoral desangelada por la ausencia de grandes mítines y una apatía generalizada en la población, parcialmente resignada a ver como Macrón se proclama ganador.
Prueba de ello es que no ha habido cierre de campaña en París a lo grande. En el último día, este viernes, el Partido Comunista Francés fue el único en convocar un mitin, en una pequeña plaza en el centro de la ciudad, que coincidió además con un día muy lluvioso. Por otro lado, el partido de Los Verdes optó por una manifestación en bicicleta, denominada
Vélorution, por el clima y la justicia social. El día anterior, Marine Le Pen convocó su último acto electoral en esta primera vuelta en Perpiñán, quizá en agradecimiento por el gran triunfo que cosechó hace dos años en esta localidad en el sureste del país en la que su partido gobierna. Ese mismo día, la candidata de los republicanos, Valérie Pécresse, cerró en Lyon, con un reproche a Macrón por haber hecho todo para camuflar la verdad, “he aquí un presidente cuya campaña ha consistido en evitar a los franceses”, como corrobora el hecho de haber participado en un único mítin el pasado 2 de abril en el estadio La Défense Arena de París.
Frente a este modelo de campaña presencial, Jean-Luc Mélenchon, última esperanza de los votantes de izquierdas, convocó un acto en su canal de Twitch el viernes a las nueve de la noche, para conectar con los más jóvenes en una nueva entrega de su emisión #
AlloMelenchon, con la intención de propiciar la participación a través preguntas de sus electores. Redundando con esta idea, unos días antes hizo un multi-mitin simultáneo para doce ciudades. En contraste con este candidato, Anne Hidalgo, nacida en San Fernando (Cádiz) y alcaldesa de París por el Partido Socialista, apenas ha tenido presencia en los últimos días.
Finalmente, el único que hizo un cierre de campaña como tal fue Éric Zemmour, líder de Reconquête!, que convocó a los jóvenes a un encuentro el jueves pasado. El mítin comenzaba con un pequeño juego de trivial online en el que todos los asistentes podían participar respondiendo a preguntas en las que se denotaba una burla a los otros candidatos de derechas, especialmente a Marine LePen, con la que podría compartir electorado. En este sentido, fue muy significativa la participación, muy aplaudida y coreada por los presentes, de Marion Marechal, nieta del fundador del Frente Nacional, Jean-Marie Le Pen y sobrina de Marine. El acto fue realmente espectacular, caracterizado por un juego de luces de los colores de la bandera francesa, música épica y cantos del himno nacional. A modo de colofón final, hubo una grandiosa entrada del dirigente del partido por un pasillo central rodeado por todos los participantes.