Las carreteras de la provincia de Málaga han estado este verano metidas de pleno en la
normalidad pospandémica con datos, que en algunos casos, han superado a los registrados en 2019.
La principal magnitud es, como no, la de las
personas fallecidas al volante,que han sumado un total de
cinco este verano, contabilizando
un caso de accidente mortal
memos que en el pasado 2021 cuando fueron seis, lo que supone un diferencial de -16,67%. Los
accidentes con heridos también han disminuido hasta un 3,83 por ciento, con 176 registrados en los dos meses fuertes del verano, sobre los 183 que se contabilizaron en julio y agosto de 2021 (-7). Además,
el total de accidentes también ha sido inferior en ocho menos, con 189 el pasado año y 181 en las operaciones de tráficos de verano que se cerraron hace unos días (-4,23%).
Lo que si
ha crecido ha sido el número de heridos que han requerido de hospitalización tras los siniestros, un total de 26 rente a los 16 de 2021 (10 más y un porcentaje del 62,50%). Por contra, hay un
descenso notable en la lesividad de
personas que no han requerido hospitalización tras el accidente de tráfico, con 295 en 2021 frente a 239 en este 2022 (-56 en términos absolutos y -18,98 en términos porcentuales”. En definitiva, según los datos aportados ayer por la Subdelegación del Gobierno en Málaga,
la lesividad en general ha sido más baja este verano que el del pasado año, con 270 heridos frente a 317, para una reducción den términos absolutos de 47 casos menos y un -1,83% en términos relativos.
Por otro lado, si nos adentramos en el detalle de las causas de los fallecimientos, una de las víctimas mortales se produjo por
atropello, otro por una
salida de vía, y los tres restantes por la
colisión de vehículos en marcha. Desde la Dirección General de Tráfico (DGT) han destacado que según los factores concurrentes asociado a los cinco accidentes con víctimas mortales se deduce que la
distracción vuelve a ser el factor recurrente más común. Tres fueron por conducción distraída, dos por velocidad inadecuada y también se ponen como causas el cansancio o el sueño y la irrupción de peatón en la calzada. También destaca que cuatro de los fallecimientos se produjeron en carreteras convencionlaes y solo uno en autopista (no de peaje)
Por último,
dos fueron mujeres y tres hombres; en el caso de ellas, una con edad comprendida entre 35 y 44 años y la otra mayor o igual a 65, mientras que en el caso de los fallecidos varones, los tres tenían entre 55 y 64 años.
A nivel nacional la cifra de muertes fue 225 frente a 215 de 2019.