La velocidad a la que transcurre el mundo del fútbol hace que el
descenso a Primera Federación se vea ya como algo muy lejano. La realidad es que este lunes 20 de mayo se ha cumplido un año exacto de ese fatídico momento.
Hace exactamente 366 días (por aquello del año bisiesto) que los blanquiazules confirmaron su
salida del fútbol profesional. Lo habían hecho ya de forma virtual dos jornadas antes, al perder en
Ponferrada. Una victoria en casa ante el Mirandés reavivó mínimamente las esperanzas, aunque todo colapsó en
Mendizorroza.
Tras una primera parte igualada,
los vascos se pusieron por delante en el minuto 46 merced a una diana de
Villalibre.
Luis Muñoz empató en el 77', aunque esto servía de poco. Los malaguistas necesitaban ganar y esperar una derrota del
Sporting de Gijón que nunca llegó.
Para colmo, Toni Moya puso el definitivo 2-1 en la recta final del encuentro.
Uno de los momentos más difíciles en la historia de un club que sueña con regresar dentro de un mes a Segunda División. Para ello, deberá afrontar el play-off de la misma forma que lo hizo en el partido de
este fin de semana contra el Antequera.