En la mañana de este viernes, a las 11.00 horas, aproximadamente, la Policía Nacional ha recibido una alerta de una posible amenaza de bomba. Ha sido una mochila sospechosa, dejada por una persona también sospechosa, la que ha alertado a los taxistas de la estación de autobuses de Málaga, que han realizado la denuncia a los agentes de seguridad. 

Así, y durante una hora, la estación de autobuses ha permanecido acordonada. Una vez activado el protocola, han acudido al lugar los Técnicos Especialistas en Desactivación de Artefactos Explosivos (TEDAX) que han procedido a la inspección de dicha mochila, quedando todo, en principio, en una falsa alarma. 

Alrededor de una docena de agentes de la Policía Nacional continúa aún en la zona de los hechos, aunque la actividad en la estación de autobuses se ha retomado con normalidad. De hecho, ya se ha procedido a desacordonar la zona, aunque se siguen investigando las causas.