La limpieza en la capital requiere de más inversión y de una auditoría, en opinión de la portavoz socialista, María Gámez.
Gámez coincide con el alcalde en la necesidad de consensuar un nuevo modelo de gestión de este servicio público entre los diferentes grupos políticos de la corporación municipal; pero, antes de ello, hay margen de maniobra, sostiene. Margen de maniobra para mejorar, defiende María Gámez.
El alcalde ha adelantado a los medios de comunicación su intención de crear una comisión a partir del mes próximo. El objetivo es estudiar el nuevo modelo de gestión que deberá adoptar el servicio de recogida y tratamiento de basuras en la ciudad a partir de 2017. Para entonces concluye el contrato que el Ayuntamiento mantiene con Limasa, una sociedad de capital mixto, integrada en su mayoría por empresas filiales de promotoras aunque de administración municipal.
Previamente, el Gobierno local del Partido Popular ha enviado una delegación del área municipal de limpieza a diferentes ciudades españolas para estudiar sus modelos de gestión.
Gámez ha recordado que en el último pleno que reunió a la corporación, los grupos de la oposición, con representación mayoría, aprobaron hacer una auditoría de Limasa y aumentar el presupuesto de limpieza de la capital en cuatro millones de euros anuales. La representante socialista ha recordado que este compromiso hay que cumplirlo.