La directiva de la entidad chiclanera se congratula de que se haya cumplido una de sus grandes demandas.
Un cúmulo de cuasalidades derivó en que la colocación de la vitrina de trofeos se hiciera la vísperas de Reyes. Y como niños en el día de Reyes se encontraron todos los integrantes del Club Waterpolo Chiclana. No sólo porque el público asistente a los encuentros y los usuarios de la cubierta podrán conocer los trofeos y logros conseguidos en nueve años, los cuales hasta la fecha se encotraban hacinados en un estantería de la entrada, sino porque además resolverá y agilizará el proceso de entrada en la escuela del club y, por tanto, a la institución. Junto a la vitrina se han colocado dos buzones uno con las hojas de inscripción y otro de recogida de las mismas. En el interior de la vitrina se colocará toda la información de la escuela, horarios, requisitos de entrada, cuotas mensuales, sistema de cobro....Cosa que hasta la fecha no era posible por falta de lugar para ello.
El club por tanto está de enhorabuena y quiere agradecer a todos los que han puesto su granito de arena para que esto sea posible, como son Antonio Ladrón de Guevara y su empresa Cristalería Picazo, por haberla construido y haberla donado de manera altruista al CW Chiclana. A Diego Rodríguez Frías, delegado de Deportes por las gestiones realizadas con Ociosur, a Rafael Rivera, técnico de la Delegación de Deportes, y a los trabajadores de la piscina por su colaboración. Y por supuesto a las ocho manos del club, que además de saber empujar agua también son manimanitas.