El portavoz de Exteriores del PP en el Congreso, Gustavo de Arístegui, ha pedido al PSOE pasar página política al caso de los aviones militares y civiles estadounidenses que pudieron pasar por España con presos talibanes y que sean los tribunales los que diriman si hubo o no delito en los vuelos sospechosos que investiga.

De Arístegui, en declaraciones a Efe, ha opinado que la explicación que dio el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, en el Congreso de que no hubo escalas de vuelos, pese a la autorización que dio el anterior jefe del Gobierno José María Aznar para casos de emergencia, “arrojaron suficiente luz”.

“No hay que buscar más historias a esto. Las cosas hay que dejarlas que sigan su curso”, ha opinado el portavoz del PP respecto a las dudas que hay sobre si algunos aviones con prisioneros ilegales pasaron por España rumbo a Guantánamo, como defiende la coalición de Izquierda Unida.

El portavoz del PP ha afirmado que ha de ser la Audiencia Nacional la que determine si hubo irregularidades en los once vuelos que hicieron escala en aeropuertos españoles entre enero de 2002 y noviembre de 2006.

De estos vuelos, dos fueron en la etapa de Aznar y nueve en la de José Luis Rodríguez Zapatero tras su llegada al poder en abril de 2004. “Con eso queda todo razonablemente dicho”, ha puntualizado De Arístegui.

“Vamos a dejar que los tribunales actúen. Como demócratas acataremos la sentencia”, ha añadido.

Ha defendido el derecho individual de algunos diputados del grupo popular a seguir presentando iniciativas para saber más de esta cuestión, aunque ha matizado que la posición política de su partido está ya expuesta.

No obstante, ha advertido a los socialistas de que si cambian su táctica y demandan más información, el PP lo hará igualmente.

“Si el PSOE dice que se siga investigando, el PP también quiere saber lo que pasó después de ese momento” (2004), ha aseverado.

El diputado del PP también ha reclamado al PSOE que deje atrás su “obsesión enfermiza” con Aznar y por intentar involucrarle en cuestiones del pasado.

A su juicio, el PSOE lo que quiere es “desmontar la realidad de ocho años de brillante gestión económica a través de ataques indiscriminados, furibundos y obsesivos”.

Otra oferta que ha trasladado al Gobierno ha sido la de buscar un “consenso activo” en política exterior.

De Arístegui ha reconocido que ha habido un “cambio bastante visible” en los últimos meses en esta materia, aunque ha añadido que aún se están pagando los “errores” de la primera etapa de Zapatero.

Se ha referido a la reciente cumbre entre España y Marruecos y a la manera en que se pueda resolver el conflicto del Sahara Occidental.

De Arístegui ha acusado al Frente Polisario de seguir “instalado en su maximalismo” y de “no evolucionar en sus posiciones”, impidiendo desbloquear las negociaciones con Marruecos.

Ha convenido con Zapatero en que el plan de autonomía marroquí puede ser una buena base para buscar una solución que respete el derecho de autodeterminación de los saharauis, lo que -ha apostillado- no implica necesariamente su independencia.

Respecto a las próximas elecciones europeas, que tendrán lugar en junio de 2009, De Arístegui ha otorgado “margen de confianza” para que el líder de su partido, Mariano Rajoy, elija al candidato que considere adecuado.

“Voy a darle ese margen de confianza al presidente. Él tiene que decidir los tiempos”, ha dicho el portavoz de Exteriores, quien ha eludido pronunciarse sobre si Jaime Mayor Oreja debería repetir como cabeza de lista.