La voz de alarma se dio hace unos de años cuando este periódico publicaba la posibilidad de un traslado de la Sección a otro observatorio con más disponibilidad de terrenos, lo que hizo que desde el Ayuntamiento se declarase la total colaboración para solventar los problemas urbanísticos que conllevaba la construcción de un nuevo edificio, al tocar parte del mismo una zona verde colindante con el Observatorio.
En el transcurso de una visita realizada al Real Instituto y Observatorio de la Armada (ROA) en San Fernando propiciada por la senadora isleña, María Jesús Castro, se anunció que esta Institución va a beneficiarse del acuerdo suscrito entre el Ministerio de Defensa y la Junta de Andalucía, a través de su Consejería de Ciencia, Innovación y Tecnología, por un importe de tres millones de euros y que serán destinados a la construcción de un nuevo edificio que acogerá la Sección de Hora.
La edificación comprometida, y que se encuentra sólo a expensas de la firma del convenio entre ambas administraciones, contará con los requisitos que demandan los nuevos avances tecnológicos, con unas instalaciones modernas y preparadas para prestar los servicios que la sociedad está demandando de este centro.
Son varias las disposiciones legales que en los últimos años se han promulgado que exigen que la hora del ROA sea referencia en los actos de la Administración Pública y privada.
Consolidación
Estos trabajos consolidarán a San Fernando como referente en el mantenimiento de la unidad básica de Tiempo, declarado a efectos legales como Patrón Nacional de dicha unidad, así como el mantenimiento y difusión oficial de la escala Tiempo Universal Coordinado, considerada a todos los efectos como la base de la hora legal en todo el territorio nacional.
Por lo que se refiere a la satisfacción de los socialistas, el portavoz del PSOE, Fernando López Gil, destacó el nivel de compromiso con la ciudad y su patrimonio adquirido por las administraciones gobernadas por el PSOE, máxime cuando la repercusión de una cantidad tan elevada será visible en una de las dependencias científicas más importantes del país, como es el caso del ROA.
“Esta inversión tiene mucha importancia desde el punto de vista científico, pero también desde la perspectiva de la creación de empleo. Los trabajos para los que se ha conseguido esta importante subvención se prolongarán, aproximadamente, por espacio de dos años y esperamos que la mayor parte de ese dinero revierta en empresas de la ciudad”, manifestó.
El montante total será aportado a razón del 50 por ciento por cada una de las administraciones firmantes del convenio en dos plazos anuales. Además también se potenciará la utilización académica civil del ROA un hecho que repercutirá en las relaciones institucionales de la ciudad con entidades científicas.
Ya en los últimos años el Observatorio ha incrementado de manera notable su actividad con la Junta de Andalucía en el campo de la divulgación científica con la participación como patronos en la Fundación Descubre.
López Gil señaló que los tres millones que serán destinados a la construcción del nuevo edificio “es una cantidad que, además del fin que va a cumplir, reafirma el posicionamiento del Gobierno de España y la Junta de Andalucía con San Fernando. Jamás en la historia nuestra ciudad había recibido tantas inversiones como en estos dos últimos años, y ello debe ser un motivo de satisfacción para todos”.
El año que viene
El nuevo edificio, cuya construcción prevé iniciarse en 2011 y concluir un año después, se sumará a las instalaciones del Real Instituto y Observatorio de la Armada que ostenta el honor de ser el observatorio astronómico más antiguo de España y uno de los más importantes del mundo.
Está dedicado a la investigación en aquellos campos de la ciencia físico-matemática que se juzguen de interés para la Marina, así como a proporcionar formación científica superior al personal que lo precise.
El edificio neoclásico, ahora apenas visible por las edificaciones que se han ido asentando en los alrededores, es un ejemplo de arquitectura de la época, sobria y austera, trazado en 1791 por Gaspar de Molina y Zaldívar, Marqués de Ureña. La primera piedra se colocó el 3 de octubre de 1793 y entró en funcionamiento en 1797.
Sin embargo, de la planta original que trazó el Marqués de Ureña queda muy poco en la actualidad, ya que se llevaron a cabo importantes modificaciones y reformas a lo largo de los siglos.
El Ayuntamiento ha estado siempre al quite para favorecer los cambios
Si bien en lo que se refiere a la financiación del proyecto se trata de una iniciativa entre las administraciones central y autonómica que van a aportar el dinero necesario, no hay que olvidar la necesaria y crucial participación de la administración local que desde el principio apostó por aportar todo lo posible y a todos los niveles porque la Sección de Hora ni ninguna otra del Real Observatorio de la Armada saliera de la ciudad.
Al Ayuntamiento de San Fernando le cabe el honor en este proyecto de haber puesto los cimientos del planeamiento necesario para que la actuación se pueda llevar a cabo, allanando el camino a los problemas que pudieran haber surgido a lo largo del proceso. La labor, además, ha sido callada y prudente porque era necesario en este caso, de ahí que hasta ahora haya sido prácticamente desconocida salvo por la información facilitada en su día por este periódico.
A nadie escapa la conciencia municipal sobre el papel que desarrolla el Real Observatorio de la Armada, no sólo científicamente, sino como uno de los símbolos de San Fernando. No en vano y aunque no tenga la trascendencia de los estudios que en él se realizan, es el edificio más visitado con creces de todos los de la ciudad.
