Pese a las protestas de los padres a las puertas del centro cada mañana durante diez minutos, difícil solución parece que tiene a corto plazo la llegada de un nuevo conserje al colegio de La Casería, tras la jubilación del que estuvo hasta el curso pasado.
La clave la ha dado la delegada de Recursos Humanos, Úrsula Ruiz, quien ha manifestado que en estos momentos el Ayuntamiento se encuentra atado de pies y manos para cubrir dicha vacante. El motivo es que no existe tasa de reposición con motivo de la Ley de Equilibrio Presupuestario aprobada por el Gobierno central y que afecta a todos los ayuntamientos, al objeto de evitar los descalabros que ha habido en algunos municipios donde no se han podido pagar las nóminas por exceso de funcionarios.
No es el caso del Ayuntamiento isleño, que apenas llega a 400 empleados públicos, pero como se suele decir, en este caso pagan justo por pecadores. Solo en contadas ocasiones y para determinadas categorías, como ha sucedido con la Policía Local, se han podido convocar oposiciones públicos.
Ruiz ha manifestado que el área de Presidencia, que es de la que dependen los conserjes, está trabajando para buscar una solución, pero de momento será el conserje de la Casa de la Juventud el que abra y cierre el colegio a las nueve de la mañana y a las dos de la tarde. Dicho funcionario, además, luego regresa a las dependencias de Juventud para atender las dudas sobre el Decreto de Exclusión Social.
Mientras llega una solución definitiva, los padres anuncian que seguirán con las protestas y no descartan llevar a cabo una movilización hasta el Ayuntamiento el próximo martes.