La junta directiva del Rayo Sanluqueño ha comunicado en un escrito que quiere trasmitir tanto a los socios como a simpatizantes y aficionados de este club el “boicot que está sufriendo tanto esta entidad como los directivos por parte de algunas personas consideradas hoy como rayistas ilustres de toda la vida”. El club que preside Magrit lamenta que se están vertiendo comentarios para desvirtuar el trabajo que viene realizando la directiva, que sólo pretende “salvar a la entidad de su desaparición tras más de 50 años de existencia”.

Los directivos muestran su tristeza porque “personas que han venido colaborando con el club han dejado de hacerlo y que socios con cierta antigüedad hayan dejado de renovar sus carnets”.
Han llegado a la conclusión de que el objetivo que se han marcado estos detractores es boicotear un nuevo proyecto para que sea todo un fracaso. En el escrito se destaca que “hemos cogido un club sumergido en la más auténtica de las miserias, sin estabilidad ni deportiva ni económica, sin proyectos y sin futuro, con todas las puertas cerradas de norte a sur y de este a oeste. Una entidad considerada como antipática para muchos con su pequeña pero fiel afición destruida y algo muy importante como haber perdido prestigio que se ganó a base de años. En definitiva, un club deteriorado por los cuatro costados”.

Los dirigentes rayistas confían en que se mensaje sirva de optimismo y lo finaliza con un “necesitamos vuestro apoyo porque sin el mismo no seremos nada”.