La productora PlayMedia Soluciones Audiovisuales y TVE han presentado el documental 'El viaje del Samurai (Aka 23 Samurauis), un trabajo que analiza el inicio de la relación entre España y Japón, con la localidad sevillana de Coria del Río como protagonista.
El documental, presentado oficialmente en Sevilla, muestra la historia de la Embajada Keicho, un hecho histórico desconocido para muchos pero considerado una de las grandes epopeyas del siglo XVII español.
Se centra en la misión de esta embajada diplomática de solicitar la apertura de relaciones comerciales con Nueva España (México) y el envío de misioneros a Japón, y en, tras el rechazo de sus pretensiones, el establecimiento en Coria del Río de varios miembros de la misión de Hasekura donde sus cerca de 700 descendientes conservan con orgullo el apellido Japón.
La aventura del documental está protagonizada por una extraña pareja: un religioso español y un samurái japonés, que pese a las grandes diferencias culturales que los separaban supieron trabajar por el objetivo de tender lazos comerciales entre los dos países.
La Embajada Keicho llegó a España en 1614 remontando el Guadalquivir hasta llegar al Puerto de Sevilla siguiendo la Ruta de Las Indias, y el primer contacto con Andalucía cautivó a muchos japoneses que decidieron no volver a su país y asentarse en los pueblos sevillanos del Guadalquivir, sobre todo en Coria del Río, dando lugar al curioso origen del apellido Japón.
La expedición se relaciona fundamentalmente con Coria porque algunos de los japoneses que llegaron, se quedaron en Coria al haberse convertido al cristianismo. Sin embargo, la expedición llega a Europa a través de Sanlúcar de Barrameda, punto en el que indice el historiador Manuel J. Parodi, que ha colaborado en la realización de este documental. En su regreso a Japón, también lo hacen desde Sanlúcar de Barrameda en 1618. En Sanlúcar fueron recibidos por el duque de Medina Sidonia, en 1614, quien ayuda a la expedición a continuar hasta Sevilla. De ahí la especial vinculación de Sanlúcar con Tsunenaga y la expedición Keicho. "Cuando la comitiva llegó a Sanlúcar por la Cuesta Belén, subirían la calle Jardines - el pavimento del siglo XVI que ha sido encontrado en la restauración del Mercado de Abastos - para acceder al Palacio de Medina Sidonia. La parafernalia de los orientales llamó la atención de los sanluqueños, y también lo hizo el hecho de que utilizaran unos pañuelos de papel de arroz para sonarse la nariz, unos pañuelos de usar y tirar al modo de nuestros kleenex", cuenta como detalle el historiador sanluqueño.
Los alumnos de Patrimonio del CEPER Mardeleva en Sanlúcar de Barrameda, ya analizaron hace unos años esta expedición y su vinculación con la ciudad, en un trabajo que fue premiado por el Ayuntamiento sanluqueño.
Sus protagonistas, el samurái Hasekura Tsunenaga y el franciscano de Sevilla Fray Luis Sotelo, lideraron la expedición diplomática enviada a España por el daimyo (señor feudal) japonés Date Masamune con el objetivo principal de establecer relaciones comerciales entre los dos países.
Tras superar el temido Océano Pacífico salvando tempestades, cruzar México en mula y atravesar el Atlántico enrolados en la Flota de Indias, la Embajada llegó a España en 1614, donde se estableció durante un año hasta conseguir audiencia con Felipe III.
No obstante, el monarca no aceptó las propuestas japonesas, a pesar de que continuaron hasta Roma para conseguir el respaldo del Papa Paulo V y de que permanecieron afincados en España durante siete años para tratar de cambiar la postura del rey de España.
Finalmente, la Embajada Keicho tuvo que volver a Japón sin haber cumplido su misión, toda una deshonra para un samurái, y el documental recoge los hechos históricos que impulsaron la creación de la embajada, ahonda en sus objetivos ocultos, narra las etapas de un viaje épico a través de medio mundo y analiza los motivos de su aparente fracaso.
Aparente, puesto que, desde la mirada personal de los autores de la obra, la herencia viva de aquellos japoneses que llegaron al Guadalquivir y se establecieron en tierras españolas dando origen al apellido "Japón", es el gran éxito de la misión Keicho.
El documental, que ha salido adelante con el trabajo de un equipo de profesionales andaluces y ha sido narrado por expertos, cuenta con ilustraciones animadas, ha sido rodado en Japón y en distintas localizaciones andaluzas, como Sevilla, Coria del Río y Espartinas.
Para su realización ha contado con la colaboración del Ayuntamiento de Coria del Río, el de Espartinas y Prodetur (Turismo de la Diputación de Sevilla).