Ya ha salido a licitación la última fase de las obras de rehabilitación del Castillito de Bajo de Guía. Las empresas interesadas tienen hasta el 11 de octubre para presentar sus ofertas para realizar unos trabajos que salen a licitación por un importe de casi 1,3 millones de euros, impuestos incluidos.

Tras una primera fase en la se efectuó la consolidación estructural del inmueble y que supuso la inversión de casi un millón de euros, ahora se inicia el último procedimiento para finalizar este importante equipamiento con la rehabilitación interior del edificio que, como instalación representativa y sede de la conmemoración de la primera circunnavegación al mundo, albergará fundamentalmente salas expositivas y las dependencias administrativas necesarias para su gestión.

El plazo de ejecución de los trabajos de esta segunda fase es de ocho meses.

Se trata de un proyecto de ciudad, importante para el equipo de gobierno, que lo incluyó en el pacto entre PSOE y Cs, y con el que se quiere dejar huella recuperando un edificio muy importante y muy querido por los sanluqueños.

 

Nueve salas expositivas

La distribución de usos del inmueble se ha hecho en coherencia con la tipología del edificio, que cuenta con plantas baja y semisótano, y planta alta, en la que se situará la cafetería y la terraza, además de una última sala expositiva. 

El proyecto diseñado por el estudio Sergio Navarro Arquitectos recoge en la planta baja la recepción, una sala expositiva central de casi 70 metros cuadrados y otras tres salas expositivas que conformarán un recorrido que continuará, a través de un núcleo de escaleras con otras cuatro salas situadas en la planta semisótano. En esta zona habrá una sala multiusos, que se dotará de las instalaciones necesarias para que pueda funcionar como sala de conferencias con una capacidad para unas 35 personas. En planta baja se sitúan los aseos para el público. Desde la zona de la recepción, y a través de otro núcleo de escaleras, se disponen en el semisótano los espacios de administración, gestión y personal del edificio.

La cafetería, situada en la parte alta del edificio, tendrá un acceso que puede independizarse para darle una mayor flexibilidad y autonomía de funcionamiento. En esta planta también se sitúa un último espacio dedicado a exposiciones y desde el que se podrá disfrutar de las vistas de la desembocadura del Guadalquivir.

El espacio expositivo total se compone de nueves salas de distintos tamaños, cuya superficie total útil es de casi 290 metros cuadrados.

El inmueble servirá no sólo para recordar la hazaña de hace cinco siglos, sino para otra serie de actividades culturales que compartirán espacio con la exposición permanente.

Esta actuación supondrá recuperar uno de los edificios más emblemáticos de los conocidos como hotelitos de la playa de Sanlúcar. Además de la propia recuperación del edificio como bien inmueble protegido, su puesta en uso supondrá revitalizar aún más la zona urbana de Bajo de Guía, seña de identidad de Sanlúcar y lugar estratégico del turismo cultural y gastronómico de la ciudad, potenciando, por su emplazamiento y proximidad a la desembocadura, la relación entre Sanlúcar, el Coto de Doñana y el río Guadalquivir, pero fundamentalmente la relación de Sanlúcar con esta importante hazaña que fue la Primera Vuelta al Mundo, así como con tantas otras expediciones de la que fue puerto de salida y regreso.