El comité de empresa y la dirección de KBR, la sociedad adjudicataria del contrato de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa para los servicios de ingeniería civil, apoyo logístico, salud e higiene industrial de la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla), cuyo uso comparten España y Estados Unidos, prevén celebrar este lunes en la sede de la Delegación Territorial de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo la segunda reunión de la negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) promovido por la entidad para extinguir 54 puestos de empleo.
José Armando Rodríguez Ardila (UGT), presidente del comité de empresa de KBR, ha explicado a Europa Press que tras la primera reunión con representantes de la empresa, el comité ha celebrado encuentros con el director de Gabinete de la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz; y con responsables del Ministerio de Asuntos exteriores, Unión Europea y Cooperación, que se han comprometido a "trasladar el asunto" a sus órganos internos.
Además, el comité de empresa ha resuelto solicitar una "reunión urgente", a ser posible esta nueva semana, con el Ministerio de Defensa, dirigido por la socialista Margarita Robles.
El comité de empresa, según ha recordado el presidente del mismo, reclama a KBR reducir el número de despidos porque "hay suficiente carga de trabajo"; eludir los "despidos traumáticos" mediante la aceptación de "voluntarios" dispuestos a ser incluidos en el ERE; mejoras en el plan social y que las indemnizaciones se eleven a las máximas por despido improcedente, es decir 45 días por año de servicio hasta la reforma laboral de 2011 y de 33 días a partir de entonces.
A tal efecto, recordemos que el pasado otoño, Estados Unidos trasladaba a Italia el contingente militar de reacción rápida en África que hasta entonces operaba en la base aérea de Morón, que fruto de una enmienda al tratado bilateral de defensa entre Estados Unidos y España, había sido habilitada como base permanente de la fuerza militar norteamericana de despliegue rápido en África.
LA PRESENCIA ESTADOUNIDENSE
En dicha enmienda, además, ambos países acordaron ampliar a un total de 36 aeronaves, 2.200 militares y 500 profesionales civiles el techo de presencia de Estados Unidos en dicha base.
Cuando Estados Unidos optó por desplazar desde la base de Morón a Italia su contingente de reacción rápida en África, José Armando Rodríguez Ardila defendía que tal traslado no tendría "por qué tener impacto" en la plantilla española de la base, razonando que si la llegada de los efectivos de la fuerza de reacción rápida en África allá por 2013 no se tradujo en la contratación de más personal civil para hacer frente a la situación, ahora "no tiene por qué haber" consecuencias negativas en materia de empleo.
En ese marco, recordaba que el incremento de la presencia estadounidense en esta base cuyos servicios civiles gestionan empresas seleccionadas por las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa y África, había ido acompañado de una reducción paulatina del personal español adscrito a tales servicios de ingeniería civil, apoyo logístico, salud, ambulancia, higiene industrial o servicios postales.
LA PLANTILLA ESPAÑOLA
El comité de empresa de los mencionados servicios civiles, en ese sentido, lleva años denunciando insistentemente una supuesta estrategia predeterminada de sustitución del personal español por profesionales estadounidenses o directamente militares de dicho país.
No sobra recordar tampoco que KBR formaba parte de la sociedad Vinnell-Brown & Root Spain (VBR), adjudicataria entre 2010 y 2015 de este mismo contrato de las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa para la base de Morón.
Y es que durante sus años de gestión de los servicios civiles de la base de Morón de la Frontera, cuya superficie corresponde al término municipal de Arahal, VBR acometió hasta tres expedientes de regulación de empleo desprendiéndose de un total de 240 trabajadores, en su inmensa mayoría españoles, durante un periodo marcado por cierto por el crecimiento de la presencia militar estadounidense en la base.
Por eso, el presidente del comité de empresa de los servicios civiles de la base de Morón recordaba recientemente que la plantilla lleva ya unos "diez años" reclamando una modificación del tratado bilateral de defensa entre Estados Unidos y España que regula el funcionamiento de dicha instalación militar, al objeto de que sean incorporadas mejoras laborales para los empleados civiles y garantías en materia de mantenimiento del empleo.
A tal efecto, rememoraba que con motivo de la concentración celebrada por la plantilla a mediados del pasado mes de noviembre ante la propia base, el PSOE, el PP y Unidas Podemos "se comprometieron a iniciar gestiones" para "salvaguardar el empleo" en el recinto, echando los trabajadores "en falta" la materialización de dicha promesa.