El portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Sevilla, Juan Espadas, ha afirmado que su modelo de gestión, si es elegido como alcalde, se basa en un "modelo democrático y de participación ciudadana", con la creación de nuevos órganos en este sentido y la reforma de las Juntas Municipales de Distrito, además de una "reestructuración completa" del papel de los delegados de distrito para que la descentralización sea "real". También, propone establecer acuerdos y convenios de colaboración estables con el tejido asociativo de los barrios para que también jueguen un papel de gestión.
"Se trata de un modelo democrático y de participación ciudadana. No es una revolución, ni decidir las cosas en círculos o asambleas, sino que se trata de que todos tengamos información de cual es la situación, que todos podamos participar y sugerir y que el que gobierna decida, pero tras un proceso de participación y con un control posterior para que rinda cuentas", sentencia el socialista, añadiendo que el primer semestre del mandato, si gobierna, sería para preparar ese cambio interno para que ya se puedan ver en el presupuesto de 2016.
En una entrevista concedida a Europa Press, Espadas ha dejado claro que la ciudad necesita que "la mano derecha del alcalde sea una persona que lleva la iniciativa económica, del empleo y del urbanismo de la ciudad", seguido también de las políticas sociales, criticando que se tenga actualmente "un delegado de Relaciones Institucionales o de Fiestas Mayores", porque, "aunque Sevilla es muy importante esta materia, ante la actual situación necesita otras prioridades".
"Necesito una persona que sea la que pongan en marcha la máquina parada de la ciudad, que se genere actividad económica para que se vuelva a crecer en población, que se reciba a personas y empresas que se quieran instalar y tener unas políticas sociales de calidad", sentencia.
Tras esto, explica que llevaría a cabo una reestructuración completa del papel de los delegados de distrito, apostando por que estos tengan con el tejido asociativo de sus barrios "una labor de cogestión y coparticipación, sin ordeno y mando, con recursos económicos y competencias y capacidad de decisión para poner en común con sus vecinos las prioridades de gasto de la zona". "Aquí ahora no se consulta a nadie, pese a que hay mecanismos para hacerlo, y los ciudadanos de los distritos no conocen las cuentas o el destino del dinero", señala.
Espadas apuesta por crear nuevos órganos, reformar las JMD y alcanzar acuerdos y convenios de colaboración estables con el tejido asociativo del barrio. Así, ejemplifica esto con la asociación del Parque Estoril en el Cerro, que gestiona su plaza con gestión sociocultural y educativa, algo que "se tiene que convertir en un convenio para que tenga financiación con distrito para que pueda asumir responsabilidades de gestión al tener experiencia con el apoyo público".