El Ayuntamiento de Mairena del Aljarafe (Sevilla) se ha encontrado de pronto con una "asesora urbanística" que a pesar de tener solo 9 años ha tenido la lucidez suficiente como para convencer al alcalde de sacar adelante su idea y de aplicar varias más en el futuro.
Se llama Helena, sus padres son arquitectos (quizá de ahí le venga la inspiración) y ha sabido unir en su mente la lucha por los refugiados sirios y el desarrollo urbanístico de su pueblo, lo que ha juntado en una carta que envió directamente al despacho del alcalde, en el que se ha reunido con él para sacar adelante su proyecto.
"Señor Alcalde Don Antonio: Soy Helena, tengo 9 años y vivo en la calle Cerro de la Campana. Me he enterado de que al final de la calle vais a hacer una rotonda, y yo he tenido una idea para decorarla. Como la paz es tan importante se me ha ocurrido colocar unos arbustos que forman el símbolo de la paz. En el espacio que quede dentro de la forma poner unas bonitas flores y por el exterior de la rotonda (no en la carretera) poner un círculo de piedras".
Es el texto de la carta que Helena envió al alcalde de su pueblo, Antonio Conde, que el edil abrió y leyó. Después avisó a sus padres para que organizasen una reunión con ella, de la que salió el proyecto final que los servicios de urbanismo ya están sacando adelante, como la propia Helena supervisa cada vez que puede.
"Helena se enteró de que íbamos a hacer una rotonda en su calle, y nos dio una idea para decorarla, en el marco de un programa de participación social, porque queremos que los vecinos opinen y participen, pero sin duda es la asesora más joven que hemos tenido", explica el edil a Efe, mientras detalla las ideas de la niña, una más de los casi 44.000 vecinos de este pueblo pegado a la capital sevillana.
Helena no se quedó ahí, ya que "ha propuesto otras mejoras de gestión ambiental, de zonas verdes o de gestión para evitar problemas con los excrementos de los perros, y todas son apreciaciones bastante buenas que se van a tener en cuenta", señala el alcalde, sorprendido también por la lucidez mostrada por "sin duda, una futura alcaldesa".
Y es que el alcalde ha valorado sobre todo que la niña "con la edad que tiene, ha aportado una visión fresca y con mayor proyección de futuro, sin los prejuicios que tenemos los adultos", y sacar adelante la idea ha sido cosa de llamar a los técnicos municipales y ponerse a trabajar.
Helena no tiene reparos en explicar a Efe como se inspiró en su proyecto: "un día antes de que lo pensara, vi que había muchos refugiados, y mis padres me dijeron que estaban haciendo una rotonda, así que pensé en diseñarla, y cuando llegué a casa escribí una carta para el alcalde, con un dibujo de la rotonda con el símbolo de la paz, pensando en que todos tenemos que hacer algo por los refugiados".
"El alcalde me escribió para pedirme que fuese al despacho y me reuniese con él", y la idea terminó germinando, aunque, al contrario de lo que el edil cree (o le gustaría), no parece que la política sea la idea de Helena para el futuro: "¿Alcaldesa? me gustaría más ser actriz".
Tablas no le faltan, desde luego, e imaginación tampoco, y de momento ya tiene en su misma calle una prueba de esa imaginación, "que el día que se inaugure allí estaré yo la primera, como debe ser", una rotonda que, para siempre, recordará que la mente de una niña de solo 9 años quiso poner un granito de arena por la paz desde un simple dibujo, o quizás desde un gran diseño.