La Secretaría General de Servicios Sociales de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales, en una respuesta al Defensor del Pueblo Andaluz por las incidencias en las renovaciones del programa de Zonas con Necesidades de Transformación Social de Sevilla, que comprende actuaciones en el Polígono Sur, Tres Barrios-Amate, Torreblanca, Polígono Norte y el poblado de El Vacie, aboga por articular tales actuaciones como un "programa municipal financiado de forma estructural y no a través de subvenciones en régimen de concurrencia competitiva".

A través de la resolución de una queja emitida el pasado 20 de septiembre y recogida por Europa Press, la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz, dirigida por Jesús Maeztu, trata las incidencias del programa de Zonas con Necesidades de Transformación Social, financiado entre el Ayuntamiento hispalense y la Junta de Andalucía. Este modelo de financiación compartida, en el que la Junta participa mediante subvenciones en régimen de concurrencia competitiva para políticas de zonas con necesidades de transformación social, motiva precisamente las incidencias en la renovación de este programa que atiende a una población especialmente sensible y que cuenta con unos 40 trabajadores.

En 2015, por ejemplo, el programa estuvo cuatro meses suspendido a la espera de que la Junta de Andalucía emitiese una resolución definitiva sobre la subvención autonómica concedida para renovar el programa y los contratos de sus trabajadores.

DE NUEVO SUSPENDIDO

Ya en 2016, el pasado 19 de marzo expiraba la edición anual del programa Zonas comenzada en 2015, tras la citada suspensión de cuatro meses de duración. Así, el programa quedaba nuevamente suspendido y sus trabajadores caían otra vez en el paro, dado que aunque el Ayuntamiento hispalense pretendía renovar las actuaciones con una nueva edición anual, la Junta de Andalucía no había abierto ni resuelto aún su convocatoria de ayudas en régimen competitivo para actuaciones en materia de zonas con necesidades de transformación social.

El programa se reanudó no obstante casi un mes después de su suspensión, gracias a unos 700.000 euros aportados en solitario por el Ayuntamiento de Sevilla, para contratar a la plantilla durante cinco meses, a la espera de que la Junta de Andalucía resolviese su participación en la renovación anual del programa, mediante las citadas subvenciones autonómicas. No obstante, esta edición transitoria del programa Zonas, financiada en solitario por el Consistorio y de cinco meses de duración, expiró el pasado 16 de septiembre sin que la Junta de Andalucía haya emitido la resolución definitiva sobre la subvención de aproximadamente 900.000 euros que habría de aportar a la nueva edición anual del programa, aún por arrancar.

A LA ESPERA DE LA JUNTA

El concejal de Bienestar Social y Empleo, Juan Manuel Flores, ha manifestado al respecto, en declaraciones a Europa Press, que en efecto, el Ayuntamiento no tiene aún la citada resolución definitiva sobre la subvención autonómica que debe complementar los 646.747 euros aportados por el Consistorio para la nueva edición anual del programa. "No la tenemos. Esperemos que no se demore mucho", exponía.

En cualquier caso, la queja promovida de oficio por la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz a cuenta de la suspensión del programa Zonas en marzo de este año fue archivada, tras constatar el departamento de Maeztu que su "continuidad quedaba garantizada" al contratar el Ayuntamiento en solitario a la plantilla durante cinco meses, "hasta tanto se resolviera la convocatoria correspondiente al presente ejercicio" en materia de subvenciones autonómicas para políticas de zonas con necesidades de transformación social.

Y durante la tramitación de la citada queja, la Secretaría General de Servicios Sociales de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales expuso que el carácter competitivo de tales convocatorias de subvenciones autonómicas "impide garantizar la subvención de forma permanente o anticipada al Ayuntamiento de Sevilla o a cualquier otra entidad solicitante".

"La pretensión de garantizar permanentemente un programa de intervención en El Vacie, y evitar así la compleja situación de sus trabajadores correspondería más bien a un programa municipal que fuese financiado de forma estructural y no a través de este tipo de subvenciones en régimen de concurrencia competitiva", esgrimía la Secretaría General de Servicios Sociales de la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales.