Argelia informó este miércoles que suspendía con efecto inmediato su
Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación con España después del giro político liderado por Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, en relación a Sáhara.
Ese suspenso inmediato se tradujo al instante en congelar el comercio exterior con nuestro país, algo que ya está afectando a todo el
tejido empresarial nacional y, por supuesto, al autonómico.
En el caso de la Comunidad Valenciana, Alicante es la provincia que ha lanzado el primer mensaje de socorro. Y lo ha hecho a través de
Carlos Baño, vicepresidente y futuro presidente de la Cámara de Comercio de Alicante.
En declaraciones a Noticias 8 Mediterráneo, Baño ha pedido al Gobierno que cambie esta situación: “El año pasado, la exportación de Alicante a Argelia se tradujo en
135 millones de euros pese a la pandemia. Ahora estábamos con un 12% más. Por eso, pedimos al Gobierno que intensifique las relaciones institucionales con Argelia y también con otros países”.
Baño ha compartido la preocupación de la decisión de Argelia destacando la relevancia del país en lo que a exportaciones se refiere: “
Argelia es el primer país no europeo donde exportamos. Ocupa el 13er lugar en el ranking de exportación”.
Además, el vicepresidente de la Cámara de Comercio de Alicante ha mostrado su miedo a perder la importación del gas procedente de Argelia: “
Sería la última puñalada al comercio, a la hostelería… Las grandes empresas se pueden permitir la apuesta por otras energías, pero si esto se mantiene sería un golpe durísimo”.